viernes, 25 de noviembre de 2016

PERÓN Y LOS JUDÍOS

Gran parte de este artículo se basa sobre la entrevista que realizó la periodista científica Verónica Engler al historiador israelí Raanan Rein, uno de los investigadores extranjeros que más ha publicado sobre el peronismo en las últimas décadas. Otra fuente de información fue la entrevista que Radio Jai (la radio judía) le hizo al periodista Daniel Blinder.

El mito antisemita
Un mito clásico de la política y de la historia argentina y que aún persiste fuertemente arraigado en algunos círculos de intelectuales y politólogos de neto corte antiperonista, es el concepto de que Perón era antisemita, por no decir nazi o fascista. El mito se generó cuando asumió la revolución del 43 con las sucesivas presidencias de los generales Ramírez y Farrell, cuyos gobiernos se mantuvieron neutrales durante la Segunda Guerra Mundial, pese a la presión de los Estados Unidos. Es indudable que entre los componentes de este grupo del golpe militar, había simpatía por Alemania e incluso por el nazismo.

El entonces coronel Perón estaba a cargo del Ministerio de Guerra, la vicepresidencia y la Secretaría de Trabajo y Previsión. Los decretos y leyes emitidos durante su gestión provocaron el rechazo de las grandes corporaciones y de los terratenientes que vieron afectados sus intereses.

Después de los episodios del 17 de octubre de 1945, Perón inició su campaña política hacia la presidencia de la Nación y la oposición en bloque se aglutinó alrededor del embajador norteamericano Spruille Braden. El rótulo de antisemitismo que pesaba sobre los hombros de los integrantes de la revolución del 43, fue aprovechado y acentuado al paroxismo contra Perón y el principal gestor fue el propio Braden.

Spruille Braden, embajador de Estados Unidos en Argentina se entrometió en forma obscena e ilegal durante la campaña electoral de 1945. Hacer click para ver  Spruille Braden http://elmordazblog.blogspot.com.ar/search?q=braden

Integración de las comunidades
                                                      Raana Rein

Raanan Rein, historiador israelí que ejerce la vicepresidencia de la Universidad de Tel Aviv en Israel, estudió en forma exhaustiva la relación entre Perón y los judíos y los resultados de sus investigaciones derrumban como un castillo de naipes el mito del antisemitismo peronista.

El peronismo enfrentó el concepto liberal del crisol de razas según el cual los inmigrantes tenían que dejar de lado sus rasgos culturales y transformarse en argentinos. El movimiento jerarquizó los derechos grupales y las distintas etnias fueron reconocidas como argentinas y se respetaron sus lazos con sus países de origen, o sea que fueron legitimados por parte del Estado.

A diferencia de la derecha argentina, que al hablar de la doble lealtad puso en cuestión la argentinidad de distintos grupos de inmigrantes, sobre todo de los judíos; el peronismo no consideró una contradicción entre la argentinidad de los inmigrantes judíos y sus lazos con el sionismo o el Estado de Israel. Perón llegó a decir en algún discurso que un buen judío argentino debe apoyar el Estado de Israel. Esta conducta fue extendida a todas las demás comunidades.

Es importante recordar que la Constitución Nacional de 1949, propiciada por el peronismo, fue una de las primeras del mundo en imponer una cláusula contra la discriminación y el racismo siguiendo en este caso los lineamientos de la Declaración de los Derechos Humanos votada en el recinto de Naciones Unidas un año antes. El artículo 28 de la constitución de marras, establece que “La Nación Argentina no admite diferencias raciales”.

El gobierno peronista ante el estado de Israel
Cuando se decidió la creación del estado de Israel en la ONU en 1948, el gobierno se mantuvo neutral, pero después, se plegó al resto de los países de América latina en establecer relaciones diplomáticas. El embajador argentino en Israel Pablo Manguel, de origen judío, destacó que en1949 la Fundación Eva Perón envió alimentos, medicinas y frazadas en gran cantidad al pueblo israelí que por entonces se debatía entre el hambre y el desarraigo. También señaló que se le otorgaron amplias facilidades a los judíos que huían de la Europa de posguerra y que casi siempre llegaban sin documentos. Y seguirá diciendo Manguel, que “EE.UU. no permitió la entrada de un buque que había partido de Chipre repleto de exiliados judíos y que Evita no solo los recibió sino que se preocupó por darles trabajo”.

                          Pablo Manguel con Juan Domingo Perón

Cuenta el periodista Roberto Bardini que “En 1946, durante el gobierno peronista, por primera vez en la historia argentina se otorgaron días libres a los soldados conscriptos judíos para que pudieran celebrar sus fechas religiosas. Un año después, se instituyó la primera Feria del Libro Judío, actividad que continuó durante décadas.

En 1948, se creó Nueva Sión, el Instituto Judío Argentino de Cultura e Información y la Cámara de Comercio Argentino-Israelí; en 1949 llegó el primer Embajador de Israel a la Argentina, y en 1951, Golda Meir visitó Buenos Aires abrazándose con Eva Perón, por la labor realizada en favor del Estado de Israel. El fructífero intercambio entre esa colectividad y el gobierno nacional sumó dos nuevos hechos en 1951. El 19 de junio, el Presidente de Israel, Dr. Chaim Weizmann obsequió una biblia antigua a Perón como gesto agradecido por la solidaridad de su gobierno con el Estado de Israel y el 5 de julio de ese año, una delegación de la colectividad israelita visitó a Perón en la Casa Rosada para apoyar públicamente su reelección presidencial.

Raana Rein asegura que hubo mucho más antisemitismo durante los gobiernos conservadores, que incluso tenían una fuerza de choque: la tristemente célebre Liga Patriótica.


        Golda Meir, entonces Ministra de Trabajo de Israel con Eva Perón.

Judíos destacados dentro del peronismo
En la búsqueda de información Rein observó con sorpresa que a principio de los años 40, el principal sindicato obrero era la Unión Ferroviaria, cuyo secretario general era el judío Rafael Kogan quien puso todo su apoyo para la campaña del entonces coronel Perón. Lo mismo hizo Ángel Perelman, quien fue primer secretara general de la Unión Obrera Metalúrgica, junto con otros judíos que tenían puestos claves en distintos sindicatos.

En 1907 llegó a Buenos Aires proveniente de Ucrania, Israel Zeitin, que en idish significa “tiempo”. Más tarde adoptó el seudónimo de César Tiempo y fue uno de los más destacados intelectuales judíos. Fue injusta y deliberadamente relegado al olvido por la prensa hegemónica y los intelectuales judíos antiperonistas como Eliascheff, Aguinis y Kobladoff.

                             César Tiempo

César Tiempo en su juventud se enfrentó a Hugo Wast (Gustavo Martínez Zubiría) quien a través de su cargo de Director de la Biblioteca Nacional hacía gala de su antisemitismo. Por entonces, la comunidad judía lo consideró su principal defensor, lo erigió como héroe y lo invitaba a todos los eventos. Sin embargo, cuando aceptó el cargo de director del suplemento cultural del diario La Prensa, que había sido expropiado por el gobierno peronista, se convirtió en una especie de paria. 

Durante su gestión, el suplemento cultural del periódico le dio acceso a muchos más escritores judíos que los que escribieron en el diario La Nación en 50 años. A César Tiempo se le cerraron todas las puertas cuando asumió en 1955 la dictadura militar. En 1973 salió del anonimato para ejercer la dirección del teatro Nacional Cervantes. Fue un prolífico escritor, poeta y dramaturgo y escribió capítulos del libro Cultura Ciudadana que debían estudiar (en forma obligatoria), los alumnos de los colegios secundarios durante el régimen peronista.

La OIA
La Organización Israelita Argentina (OIA), fue creada durante la primera administración de Juan Domingo Perón y fue de hecho la sección judía del Partido Peronista. Siempre se la consideró como constituida por un grupo de marginales dentro de la comunidad, que buscaban una oportunidad para jugar un papel más protagónico. Algunos de ellos lo eran, pero muchos otros entraron porque se identificaban con el concepto de justicia social, con las políticas económicas y sociales del gobierno o porque respaldaban y formaban parte de un movimiento que tenía un apoyo mayoritario en la Argentina.

Es interesante destacar que cuando la OIA celebró un evento importante en 1953, más de cien instituciones judías adhirieron, esto parece significativo. En algunas instituciones judías, como el Hospital Israelita, la OIA tenía una importancia crucial. Uno de los datos que incluyo en el libro, y que hasta ahora nadie conocía, es el hecho de que el mismo presidente de la DAIA, Ricardo Dubrovsky, se afilió al Partido Peronista.

¿Facilitó el peronismo el ingreso de nazis a la Argentina?
Durante el primer gobierno de Perón ingresaron numerosos alemanes al país. Algunos simplemente escapaban de una Alemania devastada, también había muchos simpatizantes nazis, e incluso criminales como Eichmann, Mengele, Ante Pavelic y Priebke. Perón no fomentó su inmigración y tampoco se preocupó en controlar mejor el ingreso en las oficinas de migraciones, pero eso era casi imposible. Todos arribaron con pasaportes falsos, la mayoría con la ayuda de la Iglesia Católica. No en vano a Pío XII se lo llamó el Papa de Hitler. También participaron otros altos prelados del Vaticano como el cardenal Humberto Siri o el arzobispo yugoeslavo Krunoslav Draganovic.



                                      Krunoslav Draganovic

La única solución habría sido, inmediatamente terminada la guerra, impedir el ingreso de todo alemán durante 2 años. Perón no tuvo la audacia de adoptar esa medida, tampoco ningún otro país lo hizo.

Verónica Engler. Los judíos del peronismo. Página 12, 24/08/2015.
Raanan Rein. Oficialistas de hoy, herederos de la OIA. Perfil.com. El observador. 26/04/2015.
Luciano Stilman. Las prioridades de Israel no siempre coinciden con los judíos argentinos. Dela Cole.com.
Roberto Baschetti. El peronismo nunca fue antisemita. Publicado marzo de 2009 en: http://www.robertobaschetti.com/pdf/EL%20PERONISMO%20NUNCA%20FUE%20ANTISEMITA.pdf
 Daniel Blinder. El peronismo y los judíos. Radio JAI, 06/07/2007 http://www.radiojai.com.ar/online/notiDetalle.asp?id_Noticia=31063

viernes, 18 de noviembre de 2016

NEVE CAMPBELL: UNA SEGUNDA OPORTUNIDAD




                               Neve Campbell (1973-).

Esta es una historia para demostrar que todos tenemos una segunda oportunidad si la sabemos aprovechar.

Cuando Neve Campbell dijo: ¡Basta, esto se terminó!, era una adolescente de 14 años, hermosa, de físico estilizado y armónico, ideal para ser una bailarina, y eso es justamente lo que ella estaba haciendo: ballet. Su pasión por la danza comenzó cuando solo tenía 6 años, ocasión en que su madre la llevó a ver Cascanueces, de Tchaikovski, una de las grandes obras del ballet clásico.

Al cumplir los 9 años, ingresó en el National Ballet School of Canada, en la ciudad de Toronto, considerado una de las mejores escuelas de danza del mundo y por lo tanto las exigencias y la disciplina a que deben someterse los alumnos son extenuantes.

No tardó mucho en tomar conciencia de que para finalizar la carrera, o se disponía de una alta carga de masoquismo, o se amaba el ballet por sobre todas las cosas y en forma pasional. Las prácticas tenían un ritmo cotidiano y agotador, los instructores eran verdaderos tiranos y la competencia entre las alumnas era feroz.

Volvemos al momento crucial de su vida, cuando a los 14 años dijo ¡basta! y decidió tirar por la borda sus ilusiones, su amor por la danza y los cinco años de tanto sacrifico físico, económico y espiritual. Es que por entonces el ballet había dejado de ser un placer para transformarse en una tortura, había pasos que le resultaban insoportablemente dolorosos, como el clásico brisé de volé y otros movimientos donde la punta de uno o de los dos pies soporta el peso del cuerpo. No le salían bien, recibía reproches, hasta que finalmente padeció un agotamiento nervioso, se le empezó a caer el cabello y desarrolló artrosis de cuello y de caderas. Los dedos del pie empezaron a deformarse y aparecieron síntomas de tendinitis. Todo era secuela de los constantes microtraumatismos que le producían los ensayos cotidianos.

Neves había visto dentro del programa de enseñanza de la escuela filmaciones de la extraordinaria bailarina rusa Maya Plisetskaya, que en el ballet El lago de los cisnes, cuando imitaba al ave, los brazos se le transformaban en alas. Maya había representado esa obra más de 500 veces y las últimas, habiendo superado los 50 años de edad. ¿Cómo era posible que ella, con tan solo 14 años, no soportara las prácticas? ¿Tan frágil era su organismo? En la escuela la consolaron diciéndole que lo que a ella le pasaba les había sucedido a muchas otras, incluso a algunas más jóvenes y que inevitablemente debía abandonar la danza.

                      Maya Plisetskaya (1925-2015)

El día que atravesó la puerta y descendió las escaleras de la escuela de baile, se cerró un telón en su vida, mientras que por delante se le abría un panorama incierto y sin un objetivo concreto. En esos momentos Neve no tenía conciencia de que el destino le brindaría una segunda oportunidad, más placentera y con un rédito económico muy superior a la danza, a menos que hubiera logrado terminar como la famosa Maya Plisetskaya.

No había transcurrido un año desde que abandonó la escuela de danzas cuando se enteró de que el Canon Theatre de Toronto estaba convocando para la selección de un reparto (casting) en las escenas de ballet del Fantasma de la Ópera. Neve se presentó y con su figura y el profesionalismo adquirido durante los duros años de aprendizaje, consiguió formar parte del elenco.

Dos años después, gracias a su encanto y una sonrisa que alegraba todo su rostro, participó en un comercial de Coca Cola. Cada vez era más conocida, y el dinero empezó a entrar con cierta abundancia. Durante el período 1992-1994 figuró como actriz de primera línea en la serie canadiense Catwalk y como personaje secundario en Kung Fu: La leyenda continúa.

Su fama se extendió fuera de Canadá cuando participó en una segunda serie llamada Party of Five, en estos lares conocida como Cinco en familia o Cuenta conmigo. Esta producción fue la que definitivamente la catapultó a la popularidad y la fama en el papel de Julia Salinger, cuando ella ya tenía 21 años pero su rostro juvenil le permitió encajar perfectamente en la huerfanita de 15 que intenta salir adelante en plena adolescencia. Por esa serie ganó en 1996 el Globo de Oro.


                      En Party of Five

En el mismo año, inició la exitosa serie Scream, un thriller traducido por innumerables títulos en América Latina, en Argentina conocido como Vigila quién llama. En la serie se invirtieron 15 millones de dólares, pero se recaudaron 173, y Neve ya era millonaria.


                                Una de las escenas de Vigila quién llama.

Su facilidad y realismo para ejecutar personajes amenazados por asesinos determinaron que fuera llamada para una nueva serie de literatura negra: Criaturas salvajes.
A los thrillers les sucedieron las series románticas, incluso con cierto contenido erótico. Estas filmaciones llevaron a que una revista del ambiente artístico la posicionara entre las 100 mujeres más sexis.




En 2004, Neve filmó The Company, cuyo guion versa sobre la historia de la compañía de danzas Joffrey Ballet. El argumento se basa en la vida de las bailarinas, sus vicisitudes, sacrificios, celos, envidias y la constante lucha por sobresalir de las demás, con un episodio de romance incluido. En una palabra, la historia de la propia Neve, y quién mejor que ella no solo como primera figura, sino que fue la creadora de la idea, participó activamente en la confección de la trama y además fue coproductora del proyecto.

Una revista del ambiente cinematográfico calificó The Company como la mejor película del año y sin duda para ella lo fue, ya que por su activa participación como actriz, guionista y coproductora, embolsó 5 millones de dólares.

  Neve contrajo matrimonio en dos ocasiones y se divorció en ambas sin que ninguno llegara a durarle 5 años. Su primer hijo lo tuvo a los 38 años con su última pareja, el actor JJ Feild, más conocido por su actuación en la película Capitán América.

Neve ya participó en más de treinta filmaciones, entre series y películas para la pantalla grande, vive holgadamente en un barrio residencial de California, es mimada por el público y respetada por sus pares. Indudablemente la ex bailarina supo aprovechar la segunda oportunidad que le ofreció el destino.

Bibliografía
- Neve Campbell. Biography. IMDb. Disponible en: http://www.imdb.com/name/nm0000117/bio
- Neve Campbell. Lifetime. Disponible en: http://www.lifetimetv.co.uk/biography/biography-neve-campbell

- Elvis Mitchel. “Film Review: The ultimate scream”. The New York Times, 04/02/2000.

viernes, 11 de noviembre de 2016

LAS VISIONES DE HILDEGARD DE BINGEN


Hildegard de Bingen (1089-1179) fue, quizás, la figura más destacada en el pensamiento académico medieval, no solo por su talento creativo, sino también por su espíritu independiente, en una época de la historia en que prevalecía el dogma sobre la razón. En una sociedad dominada totalmente por hombres supo abrirse paso con persuasión, habilidad política y un dominio de la dialéctica aplicada al razonamiento.

Dedicó gran parte de su inquietud intelectual en comprender el mundo y sus misterios y estaba considerada como una persona que poseía la virtud de curar a los enfermos. Es uno de los personajes de la época que más produjo en diversas áreas, como literatura, pintura y música. Actualmente, en las buenas casas dedicadas al género musical, se pueden conseguir piezas atribuidas a esta singular mujer. En cuanto a la pintura su arte fue revolucionario para la época.


Una porción de esta imagen se extiende fuera del marco, concepto que no ha sido repetido en la historia de la pintura.

Infancia y adolescencia
Hildegard era de cuna noble y, por ser la hija número 10 de la familia, fue entregada a la Iglesia, según la costumbre de la época. Ignoramos si tenía o no vocación, pero es indudable que esta decisión de ingresar a un convento la benefició enormemente, ya que, por entonces, era imposible para una mujer tener acceso a los libros y dedicarse a actividades creativas. 

La vida monacal le concedió la libertad suficiente para leer, escribir, dibujar, componer y hacer volar el pensamiento. En plena Edad Media, abundaban los conventos y órdenes religiosas que mantenían reglas lo suficientemente laxas para que sus miembros gozaran de cierto grado de libertad.

Hildegard ingresó en la Orden de los Benedictinos, en el convento Monte San Disibodo, en la ciudad alemana de Maguncia, que era mixto, aunque hombres y mujeres estaban distribuidos en áreas separadas.

A los 18 años recibió los hábitos de monja, pero desde la infancia tenía visiones de objetos luminosos que las atribuyó a designio divino y ocultó celosamente. No obstante, comenzó a dibujarlos. Muchos de ellos se conservan en la actualidad y son motivo de diversas especulaciones entre los investigadores, aunque hay consenso de que la monja volcaba en el papel las imágenes ópticas de episodios de aura que precedían a sus cuadros de migraña.

Imágenes en escalera o de almenas como en las fortalezas medievales, que son características de los episodios de aura en la migraña.

La inquieta abadesa
A los 38 años, Hildegard ya era abadesa y dirigía el monasterio. Debido al creciente número de miembros, trasladó la comunidad a Binge, cerca de Maguncia, y también a orillas del Rin.

Para una personalidad como la de ella, activa y curiosa, las paredes del monasterio no fueron obstáculo para su afán de conocer otras ideas. Siendo abadesa, tenía libertad de viajar y visitó diversas ciudades de Alemania y Suiza, llegando, incluso, hasta París. Donde iba, daba sermones con gran elocuencia que los asistentes escuchaban absortos.

Fue dura con los movimientos que la Iglesia consideraba herejes, como los cátaros y los albigenses, pero mostró gran amor por el prójimo y frecuentemente, asistió a personas enfermas que acudían al monasterio, influenciadas por la fama de sanadora que tenía Hildegard. 

Su fuerte concepto de justicia la puso en más de una oportunidad en problemas con sus superiores, como en la ocasión en que otorgó sepultura cristiana a un hombre joven que estaba excomulgado. El convento sufrió una interdicción, pero Hildegard, con su capacidad de persuasión, expuso sus convicciones y la sanción fue revocada.

Su talento y fama la llevaron a mantener una fluida correspondencia epistolar con emperadores, papas, obispos, gente de la nobleza y monjas de otras congregaciones.
Una de las virtudes que tenían los monasterios y órdenes religiosas era la de archivar celosamente todos los escritos que producían sus integrantes. Gran parte de la información que poseemos de la Edad Media se debe a esa sana costumbre. 

En el caso de Hildegard, se conservan las partituras de 72 piezas musicales, muchas de las cuales se pueden conseguir hoy. Las composiciones de Hildegard fueron largamente ignoradas por los musicólogos hasta bien entrado el siglo XX. Esto se debió a que su música, a semejanza de sus escritos y pinturas, rompió con los cánones de la época. Si bien fue uno de los pocos compositores medievales identificados con nombre propio, Hildegard no fue incluida en los textos musicales, debido a que su estilo único no se reconciliaba con el canto gregoriano de carácter moncorde que prevalecía por entonces. Su vocabulario musical contiene rangos vocales que abarcan hasta dos octavas, saltos amplios y floridas melodías.



Fragmento de partitura de una de las piezas musicales de Hildegard.

En lo que respecta a su obra literaria, Hildegard escribió setenta poemas y nueve libros, dos de los cuales se refieren a consejos médicos y farmacéuticos y a las propiedades de diversas hierbas.

Sus principales obras son tres y están dedicadas a la teología: Scivias, Liber Vitae Meritorum y De Operatione Dei. Estos tratados están muy vinculados con sus visiones, a menudo enigmáticas, pero llamativas y provocativas.

Cosmogonía y visiones de Hildegard
El material escrito producido por Hildegard es abundante y está salpicado de inquietantes y curiosos diseños totalmente alejados de la pintura religiosa que caracterizó a la Edad Media. Se podría decir que fue una precursora del abstracto y del surrealismo que surgieron ochocientos años más tarde.


Cuando se pretende interpretar las concepciones de Hildegard sobre temas vinculados con la ciencia, surgen ciertas dificultades. Una de ellas es la receptividad de su mente en continua evolución, que hace que visiones y teorías que aceptó en sus primeros trabajos fueran modificadas, alteradas y renovadas en trabajos posteriores.

Sin embargo, lo más fascinante de su obra es la actitud que adoptó hacia los fenómenos de la naturaleza y el universo. Para el pensamiento de Hildegard no había distinción entre los eventos físicos, las verdades morales y las experiencias espirituales. La fusión del universo externo con el interno acercó a Hildegard a una serie de visionarios medievales que culminan en Dante.

En la concepción de Hildegard, existe interdependencia entre las ideas de la naturaleza y del hombre, el mundo moral y el material, el universo, las esferas, los vientos, los humores, el nacimiento, la resurrección de los muertos y la naturaleza de Dios.
  
En la actualidad, separamos las ideas en categorías científicas, éticas, teológicas, filosóficas y artísticas, y consideramos una virtud encasillar los pensamientos dentro de límites que formamos deliberadamente. Para Hildegard, esta forma de segregación de ideas habría sido incomprensible. En su cosmovisión, lo material y lo espiritual estaban interconectados o directamente nunca estuvieron separados.

Bases patológicas de las visiones de Hildegard
 Al estudiar el fenómeno de las visiones de Hildegard, hay varias evidencias sobre su origen neurológico: sus propias descripciones, los informes de sus contemporáneos, biógrafos, como Teodorico y Godefrid, y las miniaturas del Wiesbaden Codex, preparadas bajo su supervisión.

Es evidente que, a pesar de su longevidad y la gran actividad que desarrolló a lo largo de la vida, Hildegard no gozó de buena salud. Desde la infancia tuvo episodios de trances y visiones y, periódicamente, estaba postrada durante prolongados períodos, sin que esto fuera impedimento para que continuara gobernando la comunidad religiosa.

Refiriéndose a sus visiones, Hildegard manifestó claramente que no se presentaban mientras dormía ni cuando soñaba, sino en estados de perfecta alerta e independientemente de que tuviera los ojos abiertos o cerrados. En muchos de sus dibujos, aparecen numerosas estrellas, y la imagen más destacada es un punto o un grupo de puntos de luz que se desplazan en forma de ondas o llamaradas. Se repiten con frecuencia imágenes que semejan las almenas de una muralla o de una fortificación. Estas figuras coinciden con las descripciones que hiciera 700 años después el astrónomo británico Sir George Airy sobre sus propios episodios de migraña.

Hildegard falleció en septiembre de 1179 a la edad de 90 años. Los eruditos de la Iglesia evaluaron la posibilidad de santificarla, pero no consiguieron documentar hechos milagrosos atribuidos a ella a lo largo de su vida. En realidad, el verdadero milagro fue su abundante legado adelantado a su época y que, aun hoy, sigue siendo motivo de estudio y especulaciones.

Bibliografía


viernes, 4 de noviembre de 2016

MANZI: LA SUBLIMACIÓN DE LA METÁFORA


Tengo dos caminos: ser hombre de letras o hacer letras para los hombres”.
Homero Manzi

El 1 de noviembre de 1907, hace 109 años, nacía una de las más brillantes letras del tango. Este artículo lo recuerda y le agradece la belleza de sus poemas inolvidables.



                          Homero Manzi (1907-1951)

Encuentro en una esquina
Cátulo Castillo vivía en la calle Loria al 1400, era el año 1923 y él, que solo tenía 17 años, ya mostraba su talento como letrista y compositor de la música ciudadana. En esa época Cátulo practicaba boxeo y ese día iba caminando hacia el ring del barrio silbando su primer gran éxito “Organito de la tarde”. 

Cuando iba a cruzar la esquina, se le aparece un muchacho de pantalones cortos y le dice: “Yo sé que vos sos Cátulo, mirá tengo una letrita ¿sabés?, que se llama “El ciego del violín”. ¿No te gustaría ponerle música? Cátulo leyó el papel y le gustó. “¿Cómo te llamás?”, le preguntó al otro. “Homero Manzioni, le respondió y desde ese momento surgió una estrecha amistad de la que solo los separaría la muerte de Homero en 1951. 

Así como Cátulo Castillo hacía su debut con “Organito de la tarde”, Homero lo hizo con ese tango que pasó a llamarse “Viejo ciego”. En ese primer encuentro estaba otro muchacho, un flaco larguirucho de anteojos, que Cátulo lo presentó como Sebastián Piana quien más tarde sería compositor, pianista y director de orquesta. Piana hizo la música de varias letras de tango de Homero como “Milonga del 900”, “El Pescante” y para Cátulo, nada menos que “Tinta Roja”.

Infancia
Homero Nicolás Manzione nació en 1907 en Añatuya, un pueblito que surgió del empalme ferroviario de Santiago del Estero, una casi desértica provincia del noroeste argentino.

Su padre, Luis Manzione, probaba fortuna como discreto hacendado rural. Como Homero formaba parte de una familia de 9 hermanos, debemos pensar que a su madre, Ángela Prestera, apenas le alcanzaba el tiempo para todos los cuidados de la casa. A los 7 años, ella lo llevó a Buenos Aires y lo puso pupilo en el colegio Luppi, en pleno barrio de Pompeya.

Diría más tarde Homero: “Yo era un provinciano otario que se quedaba con la boca abierta mirando un tranvía”. En su camino a la escuela pasaba por el terraplén del ferrocarril y sus ojos fueron grabando esos escenarios que más tarde volcaría en letras como Barrio de tango y Sur, dos de sus obras cumbre.

El golpe del 30
Tras un breve período en el periodismo, Manzi trabajó como profesor de literatura en los colegios nacionales Mariano Moreno y Domingo Faustino Sarmiento hasta 1930. Desde muy joven se afilió y militó en la Unión Cívica Radical, siendo uno de los exponentes más lúcidos de la línea yrigoyenista y un activista de la Reforma Universitaria cuando transitó por la Facultad de Derecho. En ese movimiento se metió a fondo repartiendo panfletos y trompadas contra un grupo de estudiantes de ultraderecha llamado “El Círculo”.

El 6 de septiembre de 1930 fue un día fatídico no solo para el país, sino también para Homero. El golpe militar de Félix Uriburu, mal llamado revolución, e inspirado por Estados Unidos tuvo consecuencias gravísimas para el país. Instaló el precedente de futuros golpes militares y fue una dictadura, de neto corte fascista, entregada a los capitales foráneos. 

En cuanto a Homero, fue expulsado de sus cátedras de profesor por el solo hecho de ser yrigoyenista, estuvo varios meses entre rejas con el traje a rayas en la cárcel de Las Heras y cuando lo soltaron, se transformó en un desocupado.

Podemos decir que aquí se produjo un punto de inflexión en su vida ya que decidió dedicarse por entero al arte; organizó una compañía de danza con la que salió de gira por el interior del país, por Chile y por Perú. Por esa época ya estaba de novio con Casilda Iñíquez Vildósola y ambos contrajeron matrimonio el 31 de diciembre de 1931. En esos días compuso “Milonga sentimental” con letra de Sebastián Piana y cantada por Carlos Gardel. Homero recortó su apellido y de Manzioni, pasó a llamarse Manzi, pero para sus amigos seguía siendo “Barbeta por la personalidad de su barba limitada al mentón.


Cuatro talentos del tango. De izquierda a derecha: Cátulo Castillo, Homero Manzi, Sebastián Piana y Pedro Maffia.

El surgimiento de FORJA
Cuando la dirección de la Unión Cívica Radical, se alejó de los principios fundacionales del partido, hábito que parece ser reiterativo en esta fuerza, para adoptar una línea conservadora, se unió al grupo que conformó FORJA (Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina), junto con Arturo Jauretche, Raúl Scalabrini Ortiz , Luis Dellepiane y otros más). Este movimiento preconizaba el retorno a los principios federalistas de la Constitución.

Durante esos años redobló su producción literaria, e incursionó en el cine. Adaptó en colaboración con Ulyses Petit de Murat la novela La guerra gaucha, de Leopoldo Lugones. Ese año fundó Artistas Argentinos Asociados, junto con Petrone, Demare, Sebastián Chiola y el productor García Smith.

Manzi frente al peronismo
El historiador Horacio Salas al referirse a la evolución política de Manzi señaló: "incluso durante la campaña presidencial de 1946, Homero Manzi continuaba militando en la UCR y -en contradicción con sus posturas frente al alvearismo- ni siquiera se alejó cuando el comando Unionista dispuso la formación de la “Unión Democrática." 

Su simpatía por el radicalismo la expresó en Milonga del 900, uno de las pocas letras de tangos que tiene una clara connotación política:

Soy del partido de todos y con todos me la entiendo,
Pero váyanlo sabiendo, soy hombre de Leandro Alem.”

Recién a fines de 1947 Manzi se acercó al peronismo por lo cual fue expulsado de la Unión Cívica Radical, lo que motivó que el 16 de diciembre de 1947 pronunciara un discurso en horario central por Radio Belgrano en el cual entre otros conceptos dijo que "Perón, es el reconductor de la obra inconclusa de Yrigoyen. Mientras siga siendo así, nosotros continuaremos creyéndole, seremos solidarios con la causa de su revolución que es esencialmente nuestra propia causa. Nosotros no somos ni oficialistas ni opositores: somos revolucionarios".

En 1948 fue electo presidente de SADAIC. Ese mismo año dirigió Pobre mi madre querida, sobre guion propio. En 1950 repitió con El último payador. Para ese entonces, sin embargo, se encontraba ya gravemente enfermo de cáncer. Seguía produciendo poesías, colaborando sobre todo con Aníbal Troilo, para quien escribiera la letra de “Sur”.

Estando internado en el hospital decidió hacer un homenaje a Enrique Santos Discépolo con música de Troilo. Sabiendo que su muerte era cuestión de días, quiso despedirse del narigón.

El 3 de mayo de 1951 Homero Manzi falleció en Buenos Aires y su amigo Aníbal Troilo le dedicó el tango “Respono”. Siete meses después, el 23 de diciembre de 1951, Discépolo siguió el camino de Homero.

El poeta
Manzi elevó la poesía tanguera a las más grandes alturas, con letras exquisitas, donde la metáfora fue reina. Incursionó además en géneros musicales como el vals y la milonga y en todos lo hizo en forma magistral. Utilizó con frecuencia ese tipo de composición poética conocido como “elegía”, en que se lamenta la pérdida de alguien o cualquier otro acontecimiento digno de ser llorado. Es muy difícil hacer una selección de las letras de Homero, por razones de espacio elegí Malena, Ninguna y Fuimos.

Malena escrita en 1941, es una joya tanto musical como lírica y parece que Homero la escribió para Nelly Omar, al menos así lo sostuvo ella toda su vida. La música es de Lucio Demare, que como suele ocurrir se inspiró en un café y la escribió de corrido. Debido a que, tanto la letra como la música, se prestan para que el cantor y la orquesta se luzcan, Malena fue interpretada por numerosos conjuntos y la cantaron Azucena Maizani, Héctor de Rosas, Roberto Goyeneche, Edmundo Rivero, Roberto Rufino y Adriana Varela. Pero una de las versiones más logradas es la de Susana Rinaldi. Hacer click para escuchar la versión con Leopoldo Federico https://www.youtube.com/watch?v=OgmYbL0TpM4

…Tus ojos son oscuros como el olvido,

tus labios apretados como el rencor,
tus manos dos palomas que sienten frío,
tus venas tienen sangre de bandoneón.
Tus tangos son criaturas abandonadas
que cruzan sobre el barro del callejón,
cuando todas las puertas están cerradas
y ladran los fantasmas de la canción.
Malena canta el tango con voz quebrada,
Malena tiene pena de bandoneón.


Otro tango dedicado a la mujer es Ninguna, escrita en 1942 con música de Raúl Fernández Siro.

…No habrá ninguna igual, no habrá ninguna,
ninguna con tu piel ni con tu voz.
Tu piel, magnolia que mojó la luna.
Tu voz, murmullo que entibió el amor.
No habrá ninguna igual, todas murieron
en el momento que dijiste adiós….


Fuimos, escrito en 1945 con música de José Dames, es metáfora pura. Se destaca la versión de Aníbal Troilo con la voz de Alberto Marino.

Fui como una lluvia de cenizas y fatigas
en las horas resignadas de tu vida
Gota de vinagre derramada,
fatalmente derramada, sobre todas tus heridas.
Fuiste por mi culpa golondrina entre la nieve
rosa marchitada por la nube que no llueve.
Fuimos la esperanza que no llega, que no alcanza
que no puede vislumbrar su tarde mansa.
Fuimos el viajero que no implora, que no reza,
que no llora, que se echó a morir….



Rescató la milonga que estaba un poco olvidada y junto con el pianista Sebastián Piana la jerarquizó en piezas como Milonga sentimental, Milonga del novecientos, Milonga triste y Betinotti.

Manzi también revindicó la música negra y lo hizo con tal mimetismo que mereció los elogios del gran poeta afrocubano Nicolás Guillén. Sus versos acunaron a la negra María, consolaron a la mulata abandonada, e invocaron al Papá Baltasar en nombre de los chicos pobres.

Sin embargo, fue en el tango donde Manzi volcó toda su capacidad creativa. A diferencia de otros grandes, empleó poco o nada el lunfardo. Horacio Salas en su obra “Tango” afirma al referirse a Manzi, que tuvo un "un lenguaje depurado, literario, pero al mismo tiempo popular. Con innegable influencia lorquiana". No cabe duda, en algunas de sus canciones se nota una relación intertextual con Federico García Lorca.

Manzi fue un prolífico escritor tanto en el género de la poesía como en la política, pero nunca escribió un libro, porque en lugar de ser hombre de letras decidió escribir letras para los hombres. Cátulo Castillo lo homenajeó con hermosos versos y Aníbal Troilo que lo consideraba su mejor amigo le puso música y así salió esta pieza brillante que se llama A Homero.

Fueron años de cercos y glicinas,
de la vida en orsay, del tiempo loco.
Tu frente triste de pensar la vida
tiraba madrugadas por los ojos...
Y estaba el terraplén con todo el cielo,
la esquina del zanjón, la casa azul.
Todo se fue trepando su misterio
por los repechos de tu barrio sur.

Vamos,
vení de nuevo a las doce...
Vamos
que está esperando Barquina.
Vamos...
¿No ves que Pepe esta noche,
no ves que el viejo esta noche
no va a faltar a la cita?...
Vamos...
Total al fin nada es cierto
y estás, hermano, despierto
juntito a Discepolín...

Ya punteaba la muerte su milonga,
tu voz calló el adiós que nos dolía;
de tanto andar sobrándole a las cosas
prendido en un final, falló la vida.
Yo sé que no vendrás pero, aunque cursi,
te esperará lo mismo el paredón,
y el tres y dos de la parada inútil
y el resto fraternal de nuestro amor...


·         Julio Nudler. Semblanza de Homero Manzi. Todo tango. http://www.todotango.com/creadores/ficha/48/Homero-Manzi
·         Norberto Galasso. Homero Manzi. http://elpancholacoca.blogspot.com.ar/2011/04/homero-manzi-por-norberto-galasso-ayer.html
·         Osvaldo Vergara Bertiche. Homero Manzi, el poeta elegíaco. Cultura y Nación. http://culturaynacion.blogspot.com.ar/2007/07/homero-manzi-el-poeta-elegaco.html