miércoles, 15 de mayo de 2013

AL BORDE DE LA CORNISA



Hiroshima y Nagasaki fueron las dos únicas ciudades destruidas por artefactos nucleares, desde que Estados Unidos, para desgracia de la humanidad, inventó la bomba atómica en 1945. No se trataba de blancos militares sino de civiles y no se perseguía un fin estratégico sino político. 



Afortunadamente esta experiencia no volvió a repetirse y los países poseedores de armas nucleares se limitaron a realizar pruebas en zonas desérticas, hasta que felizmente fueron suspendidas a partir de 1963 con el Tratado sobre la Prohibición de los Ensayos. Este pacto, firmado por John F Kennedy y Nikita Khrushchev, fue el resultado de la intensa actividad de un grupo de científicos, uno de los cuales, Linus Pauling recibió en 1962 el Premio Nobel de la Paz.


Sin embargo, tanto antes como después de la firma de ese tratado, el mundo estuvo al borde de destrucciones nucleares por la ceguera y soberbia de militares totalmente incapaces de encontrar vías alternativas a los conflictos bélicos que se sucedieron después de la Segunda Guerra Mundial.


Guerra de Corea

Después de la rendición de Japón, el Pentágono preocupado ante la hipótesis de que los soviéticos ocuparan Corea, encargó a dos jóvenes coroneles, la tarea de dividir ese territorio. Estos oficiales no tenían el menor conocimiento de Asia y sólo contaban con un mapa del National Geographic Magazine, para llevar a cabo una decisión tan importante. Esto se hizo arbitrariamente a nivel del paralelo 38 y quedó gobernado en el norte por el presidente comunista Kim Il Sung y en el sur por Syngman Ree. Ambos gobiernos se alejaron de la democracia, el norte se convirtió en una autocracia y el sur en un estado policíaco y los dos se armaron pensando en la unificación de Corea.

Finalmente, después de amenazas y amagues por ambas partes, las tropas del norte cruzaron la frontera y llegaron a Seúl en tres días. A partir de entonces, Estados Unidos se involucró directamente y su comandante fue el general McArthur, la figura sobresaliente en las batallas terrestres y navales del Pacífico.


                                   Douglas MacArthur
El conflicto duró tres años y en el momento más álgido, cuando la situación era francamente desfavorable para las fuerzas norteamericanas, McArthur solicitó que se le proveyera de una cantidad considerable de armas nucleares. Su plan era lanzar 30 a 50 bombas atómicas, esparcidas a lo largo de la frontera de Manchuria formando un cinturón de cobalto radiactivo para que durante 100 años no hubiera invasión terrestre de Corea desde el norte. Terminó siendo destituido por Truman y el 27 de junio de 1953, con la amenaza del nuevo presidente norteamericano Eisenhower de utilizar efectivamente armas atómicas se firmó la paz, quedando la situación tal como al principio y sin que hasta la actualidad se pueda resolver la terrible enemistad entre ambas naciones.


Un proyecto suicida

Es un mito que Eisenhower era un presidente de paz y es una realidad que por entonces Estados Unidos había sobrevalorado considerablemente el poderío militar soviético, exacerbado por el lanzamiento del Sputnik. En la sociedad norteamericana y en sus gobernantes, se había generado una verdadera paranoia sobre la amenaza que podía significar la potencia comunista. Como consecuencia de esta demonización surgió el SIOP (Single Integrated Operational Plan), que analizó la posibilidad de un ataque preventivo que incluía el lanzamiento de 3500 armas nucleares sobre 1060 objetivos de la Unión Soviética, China y sus aliados en Asia y Europa.

Como si se tratase de hormigas, se evaluó que las víctimas podrían llegar a los 500 millones, sin tomar en cuenta las muertes por efectos secundarios de la radiación. Este gigantesco, e irracional holocausto atómico, quedó afortunadamente en los papeles, pero hizo proliferar el número de bases norteamericanas alrededor de la Unión Soviética junto con la fabricación de miles de misiles nucleares.


La crisis de los misiles cubanos

Las razones que movieron a Khrushchev a instalar misiles en Cuba respondían al intento de equilibrar la desigualdad ante la presencia de bases norteamericanas próximas a la Unión Soviética. En 1962, los aviones de espionaje U-2, mostraron que había misiles rusos en Cuba. El Pentágono planteó la posibilidad de invadir la isla, aún al precio del estallido de una guerra global, pero Kennedy no estaba dispuesto a ganar un conflicto al precio de 70 millones de norteamericanos muertos. 

Quedaban dos posibilidades: bombardear Cuba, avisándole previamente a Khrushchev y otorgándole un plazo de 72 horas para retirar los misiles, es decir un ultimátum, o establecer un bloqueo naval. Afortunadamente prevaleció la segunda opción.


   En el Salón Oval de la Casa Blanca, el Presidente Kennedy analiza la situación con los   miembros del Estado Mayor Conjunto

El bloqueo se inició paralelamente a la activación del plan DEFCOn-2, de la fuerza aérea norteamericana, un sistema de emergencia que es el paso previo a una guerra nuclear inminente. El general Thomas Power, jefe del Strategic Air Command, quería la guerra a toda costa y manifestó que “si quedaban vivos dos norteamericanos y uno ruso, habremos ganado”. Le replicaron que debería preocuparse de que por lo menos fuera un norteamericano y una norteamericana.

Tres días después, Khrushchev manifestó su inquietud a la Casa Blanca y se iniciaron negociaciones, prevaleciendo la prudencia de Kennedy  sobre la de sus generales. 

Finalmente, los soviéticos retiraron los misiles y los norteamericanos prometieron no atacar  Cuba y desmantelar las ojivas nucleares emplazadas en Turquía.


Medio Oriente

A partir de la caída del muro de Berlín en 1989, terminó la guerra fría y con ella el riesgo de enfrentamiento entre las dos grandes potencias bélicas. Esto no significaba que el mundo quedaría libre de ataques nucleares. Israel está decidido a detener el progreso de Irán en energía nuclear, pese a que este país insiste en que la utilizará con fines pacíficos. Si aún no lo hizo es porque Estados Unidos no le dio luz verde. La historia del Estado de Israel desde su origen mostró que no tiene muchas contemplaciones en la magnitud de daños colaterales cuando tiene que atacar un objetivo. Por lo tanto, no se descarta que si decide destruir los blancos iraníes lo haga con misiles nucleares.

Israel posee más de 200 misiles con ojivas atómicas, pero pretende que su vecino no tenga ninguna, además es uno de los pocos países que no firmó el Pacto de no Proliferación Nuclear. 


China

En una oportunidad Napoleón Bonaparte exclamó: “¡Ah!...cuando ese gigante dormido se despierte.” Hace tiempo que el gigante se despertó y su crecimiento, que en materia nuclear es alarmante, se lo puede agradecer al tristemente célebre senador McCarthy, quién en 1950 expulsó de Estados Unidos al científico chino Qian Xuesen bajo el cargo de comunista. 


                                Qian Xuesen (1911-2009)
Qian se había formado en el Instituto de Tecnología de Massachusetts y trabajaba en un programa de misiles en el Pentágono. Mao Zedong lo recibió con los brazos abiertos y ese fue el nacimiento del programa de misiles balísticos chino. 


Qian fue el artífice del primer satélite chino, de la primera explosión nuclear y dio el puntapié inicial a los vuelos orbitales tripulados. Se desconoce el arsenal nuclear chino actual, porque a diferencia de los restantes del club atómico, nunca declaró el número de armas nucleares que posee. Un grupo de investigadores del Pentágono calcula que puede llegar a tener 3000 cabezas nucleares. A esto habría que agregar una red de 5000 kilómetros de túneles a más de 150 metros de profundidad, la llamada Gran Muralla Subterránea, para el transporte y estacionamiento de armas nucleares.


El gigantesco salto tecnológico de China determinó que esté construyendo su propia estación espacial y planee una nave tripulada a Marte después de 2030. Se estima que dispondría de 16 toneladas de uranio enriquecido de calidad militar y de 1,8 toneladas de plutonio. Considerando que bastan 4 kilos de plutonio y 30 kilos de uranio enriquecido para producir un arma nuclear de última generación, se puede deducir el enorme potencial atómico de China. El Pentágono ya está haciendo hipótesis de guerra y sabe que quién destruya primero los satélites artificiales de alerta precoz contra misiles enemigos y los que guían los misiles hacia el blanco, dejará ciego al contrincante. La guerra, si comienza, se iniciará por el control del espacio extra atmosférico.


Qian murió en 2009 cubierto de honores y le han erigido una estatua, pero no hay ninguna del senador McCarthy, una relativa ingratitud considerando que fue el padre natural del programa nuclear chino. 


Como dijera Groucho Marx: “la inteligencia militar es una contradicción en sus términos



Fuentes:
Olivier Zajec. China sacude el tablero. Le Monde Diplomatique, Mayo 2013.
Josep Fontana. Por el bien del imperio. Editorial Pasado Presente. Barcelona 2011.
Evan Osnos. The two lives of Qian Xuesen. The New Yorker, 3 de diciembre de 2009.

5 comentarios:

  1. ¡¡¡SE MURIÓ VIDELA!!! ¿ASADITO O LOCRO PARA FESTEJAR?

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    1. "Cuando pases por su tumba no te olvides de escupir"
      (Canción de la guerra civil española, dedicada a Franco)

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    2. CUANDO PASES POR SU TUMBA NO TE OLVIDES DE ESCUPIR
      En el tren que va a Madrid
      se agregaron dos vagones,
      uno para los fusiles
      y otro para los cojones.

      San José era liberal
      y la Virgen falangista
      y el hijito que tuvieron
      del Partido Socialista.

      Si me quieres escribir
      ya sabes mi paradero:
      tercera brigada mixta,
      primera linea de fuego.

      Artilleros a las armas
      y afinar la puntería
      que el hijo de puta de Franco
      no se ha muerto todavía.

      El burgués tiene su mesa
      y el cura tiene su misa;
      el obrero su miseria
      y el fascista su camisa.

      Y aunque me quiten el puente
      y saquen la pasarela,
      me verán cruzar el Ebro
      en un barquito de vela.

      Si mil veces los destruyen,
      mil veces los construiremos,
      somos muy cabeza dura
      los del cuerpo de ingenieros.

      Si el hijo de puta de Franco
      se llegara a morir
      cuando pases por su tumba
      no te olvides de escupir.

      Y si a Franco no le gusta
      la bandera tricolor,
      le daremos una roja
      con el martillo y la hoz!

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    3. Y si a Franco no le gusta
      la del martillo y la hoz
      le daremos una negra
      cuatro velas y un cajón

      Y si el hijo ´e puta de Franco
      no se llega a morir
      le daremos cuatro balas todas del mismo fusil

      Y si el hijo´e puta de Franco
      al fin se llega a morir
      cuando pases por su tumba no te olvides de escupir

      (las versiones son tantas...!)

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  2. Muy buena su información, Mordaz.
    Hay dos excelentes películas sobre las consecuencias de las bombas atómicas arrojadas por los yankis en Hiroshima y Nagasaki:
    -Hiroshima mon amour, dirigida por Alain Resnais y
    -Rapsodia en agosto, dirigida por Akira Kurosawa

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