“No estoy hecho para la sinfonía. Necesito el teatro. Sin él,
no puedo hacer nada”, y Carmen es la mejor prueba.
George
Bizet
Si algún
neófito del bel canto me preguntara con
que ópera se podría iniciar para introducirse en este género musical,
seguramente le sugeriría la Carmen de Bizet. Las áreas y las melodías son hermosas y fáciles
de retener, hay mucha pasión volcada en el argumento que es un relato creíble,
alejado de los temas cómicos y mitológicos que tanto abundaron en las óperas hasta
bien entrado el siglo XIX.
El
argumento de la obra está posicionado en Sevilla en la España de 1820. Entre
las mujeres que trabajan en una fábrica de cigarros se destaca Carmen, una
gitana hermosa que seduce a un suboficial francés (Don José) y lo impulsa a
desertar del regimiento para incorporarse a un grupo de contrabandistas del
cual ella forma parte.
Hasta
aquí conviene destacar el marcado contraste entre la seductora Carmen de fuerte
carácter y convicciones firmes, cuya máxima aspiración es la libertad absoluta para
encarar la vida y las decisiones, y el pusilánime Don José. Éste, por el solo
hecho de pertenecer al ejército representa a un hombre atado a reglas
estrictas. Víctima de su débil carácter, fascinado y cautivado por la gitana
abandona la vida estructurada que llevaba e ingresa al ambiente marginal de un
grupo de contrabandistas. Un mundo al aire libre, de total libertad y
decisiones propias, del cual Carmen es la máxima exponente y una precursora del
feminismo.
Escena de Carmen
Obviamente
se trata de dos personajes totalmente dispares que no pueden comulgar en la
misma dirección. Don Jose no soporta la vida libre de Carmen y su
comportamiento se le hace intolerable, especialmente cuando ella se enamora del
torero Escamillo. En el cuarto acto se produce el fatal desenlace cuando Don
José intenta impedir que Carmen ingrese a la plaza de toros para ver a
Escamillo. En un arrebato de ira extrae un cuchillo y la mata. Con esto queda
encasillada la ópera dentro del género dramático.
El
personaje de Carmen le corresponde a una mezzosoprano, que por la calidez de la
voz, se adapta perfectamente al rol que debe cumplir. Es imprescindible, para
lograr un completo éxito, que la artista sea una hermosa mujer. Afortunadamente
en las últimas décadas abundan las prima
donnas de extraordinaria belleza y physique
du rol adecuado que se
diferencian de las corpulentas cantantes de otrora. Estas cualidades se deben
complementar con una gran plasticidad de movimientos, gestos y miradas de gran
seducción. El papel de Don Jose es mucho menos exigente, basta que sea un tenor
lírico de buena voz y si en la realidad tiene cara indefinida, casi tonta,
mejor aún.
Mezzosoprano madrileña María José Montiel
La
música no tiene altibajos, mantiene a lo largo de los actos exquisitas áreas y
melodías que la gente suele tararearlas, silbarlas y hasta cantarlas. Precede a la ópera el archiconocido preludio. Una
introducción llena de energía que no escatima la participación de platillos y
metales de viento. Comienza con el tema de la corrida de toros del cuarto acto,
intercalado con la canción del toreador. En contraste con este clima de
alegría, la segunda parte de la obertura presenta una melodía, que se repite a
lo largo de la ópera, asociado con el fatal sino que le espera a la
protagonista. El trémolo de las cuerdas produce una atmósfera tensa de un
acontecimiento siniestro que se va a producir. Justo cuando esta tensión llega
a su clímax, la obertura termina abruptamente, el telón se eleva y comienza la
acción.
En este primer acto se destaca la Habanera, la popular área donde la
soprano despliega además de la voz, toda su capacidad escénica y seductora.
Aquí conviene señalar que gran parte de la melodía es una copia casi exacta de la Habanera,
cantada por un dúo de hombre y mujer, cuyo autor fue el compositor vasco
Sebastián Iradier, que bajo el título de «El Arreglito» la compuso durante su
estancia en Cuba. Bizet, en una oportunidad, manifestó que la había escuchado y
pensó que era parte del folklore español y carente de autor. Esta acotación es
simplemente un dato informativo y no pretende quitarle mérito a la maravillosa
creatividad de Bizet.
Hacer click para escuchar la Habanera
Hacer click para escuchar la Habanera
El segundo acto es sumamente vistoso por el
contenido de danzas españolas, para lo cual el reguisser necesita recurrir a una compañía de ballet bien entrenada
en coreografía española y zapateo andaluz. Es aquí donde aparece triunfante el
torero Escamillo protagonizado por un viril barítono que canta la canción de El Toreador. El contraste con Don José
no puede ser mayor. El área es una de las más preferidas por los cantantes de
esta voz intermedia, Es en este acto que Don José atrapado por las circunstancias
y el canto de sirena de Carmen se convierte en desertor y se pliega al grupo de
contrabandistas.
El acto tercero comienza con un breve preludio
de gran exquisitez formado por un dúo de flauta y harpa al cual se agrega un
suave fondo musical del resto de los instrumentos. Este momento de paz musical
es reemplazado por la marcha de los contrabandistas que comienza con la flauta
acompañada de un suave fondo de cuerdas.
Paulatinamente se van agregando los
demás instrumentos.
El libreto muestra a los contrabandistas en
plena actividad en un paisaje montañoso. Se evidencian los conflictos entre
Carmen y Don Jose quien no puede contener sus celos ante el libre
comportamiento de la gitana. Se destaca un juego de naipes donde a Carmen
siempre le toca la carta de la muerte, un presagio de lo que ocurrirá en el
siguiente acto.
El cuarto acto se caracteriza por acordes
espirituales, alegres y abandonados, pero los vientos de las maderas tocan
notas ominosas que auguran la tragedia final.
Georges Bizet (1838-1875)
Es hora de hablar del autor y la historia de la
obra. Todo comenzó con el escritor, historiador y arqueólogo francés Prosper
Merimé quien al realizar un viaje por España se enamoró de sus costumbres. Allí
conoció a una condesa que le refirió la historia trágica de un bandido
perdidamente enamorado de una mujer. En 1845, 15 años después del relato de la
condesa, Merimeé escribió la novela Carmen.
George Bizet, un sólido músico quien desde los
9 años estudiaba en el Conservatorio de París, estaba más interesado en
producir óperas que música orquestal. Ya había creado Los pescadores de perlas, que permanece incólume en el repertorio
de la lírica.
En 1872 la Opéra
Comique de París, le encomendó a Bizet una ópera. Después de numerosos
arreglos líricos y orquestales, Carmen
se estrenó el 3 de marzo de 1875. Menciono la fecha porque fue un punto de
inflexión en la historia de este género musical, ya que dio comienzo a los
argumentos con contenido real y dramático y que más tarde los italianos
llamarían verismo, un equivalente al neorrealismo en el
arte cinematográfico. Con Bizet, la ópera francesa se vio revestida de poder y
pasión con dramas cargados de sentimientos humanos y conflictos.
Aún situándose en la época, cuesta comprender
la razón que determinó que, en su inauguración, Carmen fuera un fracaso. El público y los medios reaccionaron
desfavorablemente, le dieron más importancia a los aspectos formales que a la
hermosísima música a la cual tendrían que haber prestado mayor atención.
Mujeres fumando despreocupadamente, una heroína seductora y provocativa, un
soldado que abandona el ejército para hacerse contrabandista por razones
pasionales y finalmente un asesinato, fueron demasiado para la sociedad pacata
de entonces.
Poco tiempo después, víctima de una enfermedad
Bizet moría sin haber podido gozar de los innumerables éxitos que Carmen
suscitó en la historia de la ópera.
Milton
Cross. Encyclopedia of the Great Composers and Their Music, tomo 1. Doubledy
and Company, Garden City New York 1953.
Yolanda Quincoces. Ópera!: 'CARMEN', de Georges Bizet, ¿La ópera más popular? Codalario.com. La Revista de Música Clásica, 15/04/2015.
Georges Bizet. Encyclopaedia
Britannica, tomo II. Chicago
José
Antonio Cantón. Crítica/Casticismo lírico. Abril 2018, número 339.
Muy bien escrita e informativa tu resena sobre Carmen. Es una de mis operas favoritas. Dicen que la musica mas lirica y evocativa de Bizet es el duo en el primer acto de Pescadores de Perlas. Si no lo has oido recientemente buscalo en YouTube.
ResponderEliminarAbrazos
Los pescadores de perlas la vi una sola vez hace varios años y recuerdo que tenía una melodía exquisita. Un amigo mío tiene el DVD y se lo pediré prestado.
EliminarAbrazo