lunes, 23 de diciembre de 2019

LA LECCIÓN DE LA NAVIDAD


Es el 24 de diciembre de 1914, el frente se encuentra en Flandes, hacia el este están las trincheras alemanas y a menos de 100 metros de distancia se encuentran las trincheras aliadas ocupadas por franceses, ingleses y belgas. Hacía pocos meses que la guerra había comenzado, el disparador fue el asesinato de un ignoto archiduque que adquirió trágica fama cuando en Sarajevo, un extremista arrojó una bomba a su carruaje.
         La causa de la guerra, como siempre hay que buscarla en intereses económicos, la presión de la industria bélica y la incapacidad de los seres humanos para resolver las discrepancias por la vía diplomática.
        El termómetro marca varios grados bajo cero, el terreno está cubierto de nieve y el espacio que separa ambas zonas está sembrado de cadáveres que nadie se anima ni tiene fuerzas para enterrar.
       Mientras los generales festejan la navidad en salones versallescos a cientos de kilómetros del frente, los soldados infestados de piojos tiritan de frío y comienzan a aparecer los primeros signos del pie de trinchera, el preludio de una inevitable amputación del miembro.
       Entonces ocurre lo insólito, de la trinchera alemana asoma un árbol de Navidad con velas encendidas que recibe algunos disparos que pronto cesan cuando se oye el “Stille Nacht, Heilige Nacht”. 


Del lado aliado responden con el villancico “Silent Night” y lentamente, como provenientes de la entraña de la tierra, fantasmales, sucios y barbudos comienzan a surgir de ambas trincheras los soldados, sin las armas, algunos con velas encendidas y saludándose.
       Cada uno se da cuenta que el enemigo no es ese monstruo asesino como les habían contado sus superiores. Días anteriores, el capellán les había dicho que esta guerra era una cruzada donde ellos luchaban en nombre de Dios y el enemigo representaba al demonio.

       Como de la nada surgen algunas botellas de champagne y se intercambian regalos. Cuando los superiores de ambas partes se enteran cunde la furia y la indignación, la guerra debía seguir y como castigo se hicieron cortes marciales. Se envían nuevos batallones en reemplazo de estos soldados pusilánimes, que cometieron el gravísimo delito de intercambiar saludos navideños con el enemigo.
         Si esa noche se hubiera puesto fin al conflicto, se hubieran ahorrado millones de vidas, cientos de miles de combatientes con daños físicos y psíquicos irreparables y la humanidad se habría salvado de Hitler.
Existe una coproducción europea llamada Feliz Navidad (ver video), que recrea ese episodio y es uno de los alegatos más fuertes contra la locura de la guerra.



lunes, 9 de diciembre de 2019

LIBROS AL ALCANCE DE TODOS



Alguien en Europa decidió que todo el mundo tenía derecho al acceso de la lectura, al conocimiento de los clásicos, de las grandes novelas y de toda información que pudiera enriquecer el patrimonio cultural de la gente. Con ese objetivo creó una editorial que produjo libros a precios irrisorios. El personaje se llamaba Allen Lane y la editorial que nació en Londres en 1935 y sigue gozando de excelente salud se llama Penguin Books.
En América Latina otro gran visionario tuvo la misma idea, noble grande y generosa, se llamaba Boris Spivakow y en Buenos Aires dio origen a la editorial Centro Editor de América Latina que vio la luz en 1966, pero las dictaduras que sufrimos, la incomprensión y la indiferencia le otorgaron solo 29 años de existencia. Quiero rendir homenaje a estos dos grandes hombres que tanto hicieron por la cultura de sus países y del mundo.


Allen Lane y Penguin Books
            ─Es necesario que mis libros sean más baratos para que mi público pueda comprarlos─ quien así se expresaba era Agatha Christie, la archiconocida escritora de novelas policiales. Su interlocutor era el joven Allen Lane, empleado jerárquico de la editorial Bodley Head que publicaba las obras de la escritora.
            Mientras esperaba el tren en la estación de Exeter de regreso a Londres, Lane empezó a pergeñar la posibilidad de vender libros a muy bajo precio. Esa noche se reunió con sus dos hermanos Richard y John y después de largos cabildeos decidieron producir libros al valor de 6 peniques, serían de tapa blanda con las hojas unidas con pegamento en lugar de costuras y de un tamaño que cabía en un bolsillo. Más tarde este tipo de presentación daría origen al término pocket book Tantearon editoriales, pero ninguna aceptó el desafío. Vender libros a 6 peniques la unidad, el costo de un atado de cigarrillos, requeriría 15000 unidades para solo cubrir los gastos, sentenciaron algunos. Para otros era además una ofensa hacia los autores, para el oficio de producir libros y la historia de la literatura.


                        Allen Lane (1902-1970)

            Aquí nos encontramos con esos personajes que tienen el coraje y la valentía de sumergirse de lleno en un emprendimiento que otros consideran una quimera o una aventura absurda. Allen hipotecó una propiedad y abrió la empresa con un capital inicial de 100 libras y la magra cantidad de seis títulos. La empresa era parte de Bodley Head, pero las seguras pérdidas, así como las dudosas ganancias correrían por cuenta de los tres hermanos Lane.
            Solo faltaba el nombre de la editorial y el logo. Allen insistía en que fuera un ave y cuando una de las secretarias sugirió al pingüino, Allen señalo que estaba de acuerdo porque “somos un ave sin pretensiones”. Los demás asintieron y después de varios diseños y posturas, surgió finalmente el pájaro con el nombre de Penguin Books. Los primeros libros salieron de imprenta en marzo de 1935 y la cadena de comercios Woolworth y los Ferrocarriles Británicos se convirtieron en los primeros clientes: La reacción del público fue explosiva, a los pocos días ya se habían vendido 150.000 ejemplares. En menos de un año el número de libros vendidos alcanzó el millón y los hermanos Lane ya separados de Bodley Head, se reinstalaron en edificios, acordes con la magnitud de la creciente empresa.


                        El logo de Penguin Books

            Durante la Segunda Guerra Mundial había tantos soldados británicos con un Penguin Book en el bolsillo de sus casacas que el Estado Mayor inglés le duplicó a la editorial la cuota de papel estipulada por el racionamiento. Durante los bombardeos a la ciudad de Londres, la gente se refugiaba en las estaciones del subterráneo y muchos llevaban su pocket book para evadir la angustia de lo que sucedía en la superficie. Al terminar la guerra la cantidad de libros vendidos había superado los cien millones. Recién en 1970 el precio de un Penguin Book subió al valor de una libra y seguía siendo el libro más barato. Actualmente en cualquier parte del mundo se puede encontrar en los medios de transporte algún lector ensimismado en la lectura de su Penguin Book.

Boris Spivakow y el Centro Editor de América Latina
Boris, hijo de inmigrantes rusos nació en Buenos Aires en 1915 y desde la infancia se interesó por la lectura que se transformó en una pasión que mantuvo hasta su muerte. Solía leer mientras caminaba lo que en varias oportunidades le significó choques y tropezones. En la adolescencia, lo atrajo también la política y se hizo miembro activo del partido comunista y con este rótulo conoció las cárceles del peronismo que lo alojaron en varias oportunidades.


                               Boris Spivakow (1915-1994)
Junto con César Civita y otros inmigrantes recién llegados, a quienes les enseñó el castellano, fundó la Editorial Abril. Mientras tanto, había completado la licenciatura en matemáticas y esa formación hizo que Manuel Sadosky lo convocara para dictar clases de Análisis Matemático en la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad de Buenos Aires.
Con su bagaje de conocimiento como editor y con el apoyo del rector Rizieri Frondizi, Boris fundó EUDEBA (Editorial Universitaria de Buenos Aires), cuyo objetivo era producir libros de calidad a bajo costo. La editorial incluyó tópicos de ciencia, literatura, historia, arte y cultura general. Se transformó en la más importante de América del Sur con 803 distribuidoras y librerías en todo el país, en el resto de América y varias naciones de Europa. Estos logros adquieren valor descomunal al considerar que nunca tuvo suficiente apoyo económico durante los distintos gobiernos que se sucedieron, pero lo peor estaba por venir.



La noche de los bastones largos
EUDEBA había alcanzado a publicar el ejemplar número diez millones, cuando el 28 de julio de 1966 se produjo la tristemente célebre “noche de los bastones largos”. Juan Carlos Onganía el general de caballería de las tres neuronas: una para manejar el caballo, otra para saludar con el sable y la tercera para desfilar, había derrocado al gobierno democrático de Arturo Illía. Bajo sus órdenes, fuerzas policiales entraron en varias facultades y sacaron a bastonazos a profesores y alumnos. Nadie se salvó del ataque, mujeres, jóvenes y personas de edad avanzada, recibieron los golpes en igual medida por las descerebradas fuerzas del orden. Fue la noche más negra en la historia de la universidad, de la educación y de la cultura.


Boris no se amilanó y fundó el Centro Editor de América Latina (CEAL) que siguió los principios de EUDEBA, vender excelente material y a bajo precio hasta que en 1980, bajo la dictadura de Videla tuvo lugar en un terreno baldío, la quema de libros más grande en la historia argentina. Desde Sófocles hasta Alejandro Dumas, desde Platón hasta Charles Dickens, todos se estaban transformando en cenizas que el viento desparramaba. Miles de horas de escritura, de trabajos de corrección, de gastos de imprenta, logrados trabajosamente, eran pasto de las llamas.
Para los militares cuyos cerebros fueron lavados durante su paso en las instituciones castrenses, un libro era subversivo o comunista hasta que no se demostrara lo contrario. Los uniformados danzaban alrededor como las brujas en un aquelarre en homenaje a Satán, porque quemar libros es un acto diabólico, una de las perversiones más bajas a la que puede llegar un sistema totalitario. Las publicaciones que fueron presa de las llamas no proclamaban la violencia ni el desorden, eran clásicos de la literatura, pero aquellos militares estaban mentalmente incapacitados para analizar tales detalles, eran libros y los quemaban con el mismo placer que embargaba al hombre de las cavernas cuando contemplaba el fuego que le daba calor.
Sin embargo, Boris no se doblegó y siguió trabajando. Sus últimos días estuvieron ligados a la pobreza, vivía muy modestamente, usaba siempre la misma ropa y tenía zapatos muy gastados. Nunca retiró un centavo de la editorial y si entraba algún dinero se reinvertía en papel y tinta otra vez, pero ese modo de trabajo generó un grado de endeudamiento tan grande que cuando murió el 16 de julio de 1994, también murió la editorial.
Boris era un idealista, un espíritu puro, cuyo único interés fue ofrecer conocimientos a través de publicaciones accesibles para todos. Se puede decir sin pecar en exageración, que contribuyó con su talento, empuje, audacia y enorme coraje, al crecimiento de toda la cultura de argentina y de América del último medio siglo.

Peter Conrad. He made us pcik up a Penguin. The Observer 08/05/2005.
Juan Forn. Libros para todos. Página 12 contratapa, 31/05/2013.
Robert McCrum. What would Allen Lane make of Amazon? The Guardian 27/09/2013
Jula Sagard. The tale behind the peguin logo. Creative Bloq, 21,11,2013.

Tomás Eloy Martínez. La batalla de un hombre solo: La Nación 18/03/2006.
Mempo Giardinelli. Vienticuatro toneladas de fuego y memoria. Página 12 26/6/2013.
Delia Maunás. Boris Spivacof. Memoria de un sueño argentino. Editorial Colihue.
Oscar Ranzani. El vínculo de Boris con los libros era absoluto. Página 12, 24/3/2006.

jueves, 28 de noviembre de 2019

REICHE Y EL ENIGMA DE LAS LÍNEAS


El desierto de Nazca está constituido por una planicie de 1000 kilómetros cuadrados rodeada de montañas de baja altura. El clima es relativamente benigno con temperaturas que rara vez alcanzan los 40 grados. Durante la noche se comporta como todo desierto, la atmósfera se enfría y el termómetro marca unos pocos grados. También como todo desierto hay ausencia casi total de humedad, porque en Nazca, la lluvia nunca ha osado asomarse por ese territorio. Durante la noche, una atmósfera totalmente limpia permite ver la Vía Láctea en todo su esplendor.
Penetrar en esa monótona vastedad sin compañía alguna es temerario, no hay disponibilidad de agua y cualquier accidente se puede transformar en mortal al no poder el infortunado recibir ayuda de nadie. Sin embrago, durante gran parte del siglo XX una mujer lo habitó en soledad, fascinada por el misterio de unas gigantescas figuras que una civilización preincaica desconocida trazó hace 1500 años. Algunas hipótesis posicionan el origen de estos geoglifos mucho más atrás en la historia remontándolos a varios siglos antes de Cristo.
María Reiche nació en Dresden, Alemania en 1903 y llegó a Perú con el título de matemática cuando tenía 25 años y durante un tiempo se desempeñó como institutriz del cónsul alemán en Cuzco. La civilización Inca, la arqueología y la geografía del lugar la fascinaron, pero le faltaba un toque más de magia para quedar totalmente cautivada por aquel país tan lejano de su hogar. Ocurrió cuando conoció al doctor Paul Kosok, un antropólogo norteamericano, para quien ofició de traductora al castellano sus trabajos en inglés.


                                                María Reiche (1903-1998)

En esos trabajos Kosok había expuesto sus observaciones sobre las líneas de Nazca. Líneas rectas que no parecen conducir a ningún lado y otras con distintas curvaturas que carecen de significado. Algunas son como canales de escasos centímetros donde la corteza superficial fue removida exponiendo el subsuelo blanquecino que hace un fuerte contraste con el polvo del terreno. En otras, el trazado está constituido por cordones de piedras que como minúsculas murallas sobresalen en la superficie. La situación cambia totalmente cuando se las ve desde la cima de una sierra, pero mucho mejor aún desde una avioneta a más de 300 metros de altura.
Fue desde el aire que Kosok le mostró a Reiche las líneas de Nazca y ante ella se abrió un mundo maravilloso de figuras y las más destacadas eran las de un mono, con su cola enrollada, una araña y un colibrí, pero hay muchas más. Reiche se enamoró sin concesiones de esa gigantesca pizarra natural y se dispuso a estudiar su significado.


                                     Araña

Kosok se volvió a su país en 1949 y ella se quedó en aquel desierto hasta el día de su muerte. Munida de un sextante, escoba, binoculares, una brújula, cinta métrica y una silla escalera intentó descifrar su contenido. En Lima la llamaban la “dama de las líneas de Nazca” o “la guardiana de las líneas” y los habitantes de los pueblos cercanos la apodaron “la mujer que barre el desierto.” No faltaron quienes la tomaron como una bruja que se pasaba el tiempo barriendo y midiendo el terreno.
                                    
                                  Mono

Las líneas de Nazca están envueltas en un halo de misterio cualquiera sea el ángulo en que se las quiera analizar y en cada uno abundan las teorías. Uno de los primeros interrogantes es la razón de todas esas figuras y líneas. Sobre este aspecto hay múltiples hipótesis, para Reiche, que investigó su orientación astronómica, se trataría de marcadores del inicio del verano, una especie de calendario de tamaño descomunal. Las líneas estarían destinadas a fijar los ciclos y los cambios climáticos en las sociedades agrarias de la civilización nazca. En 1949 publicó su primer artículo sobre las figuras: ‘Mistery on the desert. A study of the ancient figures and strange delineated surface’ (Misterio en el desierto. Un estudio de las figuras antiguas y la extraña superficie delineada).
Otra teoría que prevalece es la religiosa, como los dioses se encuentran en los cielos, los nazcas realizaron esas gigantescas figuras como ofrendas para que las vean desde las alturas en que se encuentran. Solo pueden ser vistas desde el cielo, fueron hechas por el hombre no para que goce contemplando la perfección de su obra, porque simplemente no las puede ver, sino para los dioses. Resulta maravilloso que estos habitantes fueran los únicos en la historia del arte en realizar sus dibujos sin perspectiva alguna, sin poder situarse a una distancia lo suficientemente lejana como para apreciar la evolución de su obra y evaluar si el diseño es correcto, porque son figuras de tamaños que oscilan entre 100 y 400 metros. Sin embargo, la geometría y proporciones de las figuras son perfectas.
La incógnita que prevalece sobre cualquier aspecto que pretende ser abordado sobre las líneas de Nazca, dio pie a que surgiera la hipótesis de que una civilización extraterrestre fuera la creadora de estos geoglifos. El paladín más entusiasta de esta teoría fue El escritor suizo Erich von Daniken que la dio a conocer en 1968 en Recuerdos del futuro, libro del cual vendió millones de ejemplares. Las consideraba una de las pruebas de que las sociedades del pasado habían recibido la visita de extraterrestres que habían influido en la historia. Para muchos académicos e investigadores, se trata de una fantasía sin sostén alguno, pero la nebulosa de desconocimiento que envuelve a las líneas de Nazca hace difícil descartar de plano la hipótesis alienígena.

                               Colibrí
Gracias a las gestiones y esfuerzos de Reiche las líneas de Nazca forman parte del Patrimonio de la Humanidad de acuerdo a lo establecido por la UNESCO en 1994. Esto permite generar reglamentos y leyes que contribuyen a la preservación del lugar.
María Reiche falleció el 8 de junio de 1998 a los 95 años, sus restos descansan en un sencillo museo de la ciudad de Nazca. Allí se puede encontrar toda la información sobre las misteriosas líneas a cuyo estudio dedicó la mayor parte de su vida.

Alberto López. María Reiche, la guardiana del misterio del desierto de Nazca. El País, 15/05/2018.
Julián Varsavsky. Arte de la tierra al cielo. Página 12, 21/02/2016.
Oscar Mercado. El verdadero misterio de las líneas de Nazca. Los Divulgadores, 23/07/2011.

lunes, 18 de noviembre de 2019

EL SER HUMANO Y LA MÚSICA


He disfrutado haciendo muchas cosas en la vida, pero de algún modo la música siempre me ha acompañado.
Daniel Barenboim

Un hábito muy antiguo
La música es algo inmaterial que nos puede elevar hacia alturas sublimes, transportarnos a momentos del pasado o entrar en comunión con quienes nos acompañan. Sin embargo, este fenómeno es tan complejo que recién estamos empezando a conocer sus mecanismos. Aquí analizamos la relación entre el ser humano y la música, cuál es la función adaptativa que cumplió desde nuestros orígenes, los beneficios que nos aporta y cómo funciona y se modifica el cerebro por acción de la música.
      Se suele mencionar que hacer música o disfrutar de escucharla es un arte o una capacidad adquirida por el ser humano, el único mamífero que puede producir este fenómeno. Hasta hace pocas décadas prevaleció el concepto de la música como un producto refinado de la cultura humana. Si bien existen construcciones musicales que varían entre las culturas, todas responderían a mecanismos innatos. En otros términos, crear o disfrutar de la música forma parte de la naturaleza humana, o sea que estaría en nuestros genes. 
      La música no es un producto reciente de los humanos. Los cantos y el empleo de instrumentos que producen sonidos armónicos son tan antiguos como la comunicación verbal, es decir, el lenguaje. La arqueología demostró la existencia de instrumentos musicales (tambores, flautas y los precursores del arpa y el laúd) que tienen una antigüedad de 30.000 años.
       
Por lo tanto, la música es un fenómeno antiguo y no una adquisición reciente de la inteligencia humana, ya que trasciende el tiempo, el lugar y la cultura.



                            Primeros instrumentos musicales

¿Por qué los seres humanos somos musicales?
La música es menos esencial que el lenguaje. Podemos desarrollar una vida normal sin la música, pero no podemos comunicarnos sin el lenguaje. Por eso, desde hace centurias, biólogos y filósofos se hicieron las siguientes preguntas: ¿Para qué sirve la música? ¿Qué función adaptativa cumplió en nuestros primitivos ancestros y qué ventaja de supervivencia aportó en el curso de la selección natural de la especie como para que constituya una actividad innata? La mejor respuesta la ofrece la siguiente anécdota:
        Es el 24 de diciembre de 1914, el frente se encuentra en Flandes, hacia el este están las trincheras alemanas y a menos de 100 metros de distancia se encuentran las trincheras aliadas ocupadas por franceses, ingleses y belgas. Entonces ocurre lo insólito, de la trinchera alemana asoma un árbol de Navidad con velas encendidas que recibe algunos disparos que pronto cesan cuando se oye el “Stille Nacht, Heilige Nacht”. Del lado aliado responden con el villancico “Silent Night” y lentamente, como provenientes de la entraña de la tierra, sucios y barbudos comienzan a surgir de ambas trincheras los soldados, sin las armas, algunos con velas encendidas y saludándose. Cada uno se da cuenta que el enemigo no es ese monstruo asesino como les habían contado sus superiores. Días anteriores, el capellán les había dicho que esta guerra era una cruzada donde ellos luchaban en nombre de Dios y el enemigo representaba al demonio. El gigantesco poder de la música había logrado que aquellos que se odiaban y debían matarse mutuamente, salieran de sus respectivas trincheras para saludarse y abrazarse.

                               Encuentro de Navidad entre enemigos

          Todo parece indicar que el valor de la música como mecanismo de adaptación se encuentra más a nivel grupal que a nivel individual. La música fue un método de cohesión, especialmente como componente esencial de la danza, los rituales religiosos y las ceremonias, que sirvió para afianzar las relaciones interpersonales y la identificación con el grupo.

La emoción en la música
Leer un libro, escuchar un poema o contemplar una obra de arte pueden producir respuestas emocionales, pero nunca de la magnitud y la frecuencia que brinda la música. Una pesquisa realizada en una población adulta de Inglaterra reveló que más del 80% de los entrevistados respondía emocionalmente a la música con escalofríos, alegría, tristeza o placer y hasta llanto. Las melodías y canciones que más suscitan respuestas emocionales son aquellas que ya fueron escuchadas previamente y son reconocidas por el receptor, porque las conexiones de las áreas de la música con los centros de la memoria están muy desarrolladas.
               Las emociones musicales activan una zona del cerebro llamado aparato límbico, provocando cambios en el flujo sanguíneo en diversas zonas del sistema nervioso central. Algunas de estas regiones participan en las respuestas a estímulos que generan gran satisfacción, como los alimentos o los hábitos que producen adicción (consumo de alcohol, tabaquismo). Esto significa que la música tiene acceso a sustratos neurales que están asociados con disparadores primarios como la comida y el sexo.


          
Procesamiento en el cerebro y neuroplasticidad generada por la música
         El procesamiento de la música en el cerebro es uno de los misterios apenas develados por las neurociencias. La onda sonora impacta sobre la membrana timpánica que transmite la vibración a la cadena de huesecillos (martillo, yunque y estribo), que a su vez desplaza el estímulo a las células ciliadas, cuyas prolongaciones o axones forman el nervio coclear que ingresa al cerebro. Lo fascinante de este complejo proceso es que transforma fenómenos mecánicos en impulsos eléctricos que van a distintas zonas del cerebro que los analizan y desglosan en timbre, intensidad y tonos, formando una melodía. El ensamblado de estos impulsos es un fenómeno que todavía sigue intrigando a las neurociencias.
           Comparado con los demás sentidos, el oído posee la menor cantidad de células sensoriales: alrededor de 3500 en relación con los 100 millones de fotorreceptores de la retina ocular. Sin embargo, la respuesta neurológica a la música es sumamente rica en matices.
En el sistema nervioso central no existe una zona especializada para la música, como ocurre con los sentidos, sino que hay numerosos territorios neuronales distribuidos en todo el cerebro, incluyendo zonas involucradas en otras cogniciones, como es el lenguaje.
       El procesamiento de los sonidos, como los tonos musicales, se inicia en el oído interno (cóclea), que clasifica los sonidos complejos producidos por un instrumento musical, por ejemplo el violín, en sus frecuencias elementales constitutivas. Seguidamente, la cóclea transmite esta información a lo largo de fibras separadas del nervio auditivo en forma de descargas neurales que alcanzan la corteza auditiva del lóbulo temporal.
       Las neuronas diferentes del sistema de la audición responden específicamente a determinadas frecuencias. Las células vecinas se ajustan a la misma frecuencia determinando que la corteza auditiva forme un mapa de frecuencias a lo largo de su superficie.
      A pesar de que en un principio se creía que el hemisferio cerebral izquierdo procesaba el lenguaje y el derecho, la música, tras numerosos estudios llevados a cabo se ha descubierto que la percepción musical se realiza en ambos hemisferios.

         Neuroplasticidad generada por la música
               Pocas son las personas que se convierten en instrumentistas virtuosos, un atributo que obtienen gracias a cierta predisposición innata y a extenuantes horas de ensayo durante su vida. Estos personajes constituyen el modelo ideal para estudiar el fenómeno de la neuroplasticidad. La neuroplasticidad es la capacidad que tienen las células nerviosas para generar uniones más numerosas e intensas entre sí como respuesta adaptativa a un estímulo o necesidad.
          Existe evidencia abundante de que el cerebro de los músicos es modelado por las prácticas continuadas y los ensayos previos a las actuaciones. Una de las primeras zonas del cerebro que se modifica es la motora. La representación cortical del área motora que regula el movimiento de los dedos de la mano izquierda, especialmente el quinto dedo, está más desarrollada en músicos que tocan instrumentos de cuerda que en el resto de las personas. Esto se debe a que los instrumentistas del celo, la viola y el violín pulsan las cuerdas en forma rápida y continua con los dedos de la mano izquierda. En cambio, la zona motora del cerebro que coordina los movimientos de los dedos de la mano derecha no sufre modificaciones, ya que el arco de los instrumentos de cuerda exige movimientos del brazo y de la mano, pero no de los dedos. Esta neuroplasticidad se acentúa más cuando el instrumentista comenzó a practicar a temprana edad.
        Las adaptaciones neuronales no se limitan a las zonas motoras. Varias zonas cerebrales relacionadas con la audición, duplican su tamaño en los músicos profesionales en relación con un amateur y el resto de las personas.
      Considerando que la música es una de las habilidades más relacionadas con la neuroplasticidad, está creciendo en forma considerable el empleo de la musicoterapia para numerosas afecciones, como el autismo, la fibromialgia, los traumatismos cerebrales y la esclerosis múltiple.
En conclusión, hacer música o disfrutar de ella es una capacidad del ser humano a lo largo de la historia y de todas las culturas. También constituye una herramienta poderosa para las emociones y la modulación del estado de ánimo. No se trata de un entretenimiento más, sino de otro lenguaje cuyo mecanismo recién estamos empezando a descifrar.

Referencias
-       La tregua de Navidad de la Primera Guerra Mundial. National Geographci, 22/12/2016.
-       Weinberger NM. Music and the brain. Scientific American, November 1, 2004.
-       Paraskevopoulos E, Kuchenbuch A, Herholz SC, Pantev C, et al. Evidence for training-induced plasticity in multisensory brain structures: an MEG study. PLoS One. 2012; 7(5).
-       Peretz I. The nature of music from a biological perspective. Cognition 2006; 100:1-32.
-       Nelken I. Music and the auditory brain: where is the connection? Frontiers in Human Neuroscience 2011; September 27.

viernes, 8 de noviembre de 2019

NEOLIBERALISMO Y CORPORATOCRACIA


Gran parte de este artículo está basado en el Libro de John Perkins: Confesiones de un gánster económico (Confessions of an economic hit man). En este fascinante testimonio, John Perkins relata su cambio de trayectoria personal, desde servidor obediente del imperio a defensor apasionado de los derechos de los oprimidos. Discretamente seleccionado por la CIA y puesto en la nómina de una firma internacional de consultoría, estuvo en Indonesia, Panamá, Ecuador, Colombia, Arabia Saudí, Irán y otros países estratégicamente importantes del planeta. El libro está escrito en primera persona asumiendo el comportamiento de haber sido un gánster, ahora arrepentido.

                                    Perkins y su libro

Existen 2 formas de conquistar y colonizar una nación: por las armas o por la deuda. Los asesinos económicos son los primeros en crear este infierno global y trabajan de muchas maneras diferentes. Identifican a un país que tiene recursos que las corporaciones codician, por ejemplo petróleo. Entonces se concreta un gran préstamo a través del Banco Mundial o una de sus organizaciones hermanas como el FMI, pero el dinero nunca va realmente al destinatario sino a las grandes corporaciones para fabricar proyectos que benefician a unas pocas personas, pero que no ayudan al resto de los habitantes.
El operativo termina cuando el país queda agobiado por una deuda gigantesca e impagable, lo cual es parte del plan. Entonces es el momento en que estando en posición de fuerza los factores de poder dicen: nos deben muchísimo dinero y no están en condiciones de devolverlo, la alternativa es que nos vendan su petróleo a un precio muy razonable, pero también queremos construir una base militar en vuestro país, o pueden enviar tropas en apoyo a las nuestras en algún lugar del planeta, como fue en Irán. Las exigencias continúan: deberán votar en la Naciones Unidas y en los foros internacionales para que se privaticen los servicios de energía eléctrica y de agua corriente que serán vendidos a empresas norteamericanas.
Cuando fallan todas estas medidas de soborno ante estadistas que se muestran incorruptibles, es el momento de actuar de los chacales que eliminan políticamente y de ser necesario físicamente, al estadista rebelde.

         Irán y Mohammad Mossadegh

                           Mohammad Mossadegh (1882-1967)

Este método tuvo su debut en los años 50 cuando Mohammad Mossadegh fue elegido democráticamente en Irán como primer ministro y considerado una esperanza para la democracia en Oriente Medio y en el resto del mundo. Una de sus primeras medidas fue decretar la nacionalización de la Anglo-Persian Oil Company, porque le pagaba magras regalías al estado. El decreto fue aprobado por el Congreso y el Reino Unido amenazó con enviar su flota y elevó sus quejas ante la Corte Internacional de la Haya. Mossadegh realizó una histórica defensa de los derechos de Irán sobre su petróleo y frenó la decisión de la Haya.
La alternativa era una invasión militar, pero se optó por enviar a Kermit Roosevelt (1916-2000), presidente de la recién fundada CIA quien viajó a Irán con una valija repleta de dólares con los que sobornó a civiles y militares para derrocar a Mossadegh. El intento fracasó, pero Roosevelt no se desanimó, llevaba en sus genes las agallas y sueños imperiales de su abuelo “Teddy”. Respaldado y financiado por las corporaciones petroleras organizó un segundo complot. Pagó a turbas de maleantes que invadieron las calles e infiltró agentes provocadores entre las filas comunistas. En un clima de hostilidad creciente y con el levantamiento de una parte del ejército liderado por un sobornado general, Mosaddegh cayó. Fue reemplazado por una dictadura monárquica que puso en el poder al sha Reza Phalevi. Todas las medidas progresistas de Mossadegh fueron anuladas y él fue encarcelado.

                           Guatemala y Jacobo Arbenz 

Cuando Arbenz se transformó en el presidente de Guatemala, el país estaba totalmente sometido a los intereses de la United Fruit de los Estados Unidos que se había apoderado de un extenso territorio de 250.000 hectáreas cultivables, de las cuales solo el 15% estaban en producción. La empresa era un estado dentro del estado donde imponía sus propias leyes. (hacer click aquí para ver Operación Éxito) https://elmordazblog.blogspot.com/search?q=operaci%C3%B3n+%C3%A9xito).

                                       Jacobo Arbenz (1913-1971)

Arbenz hizo una reforma agraria para quitarle a la empresa territorio que tenía improductivo y entregárselo a los campesinos. La CIA desató una campaña de información masiva sobre la población de Estados Unidos convenciéndola de que Arbenz era una marioneta soviética, cuando en realidad ni siquiera tenía relaciones diplomáticas con aquel país.
Con apoyo de militares locales fácilmente sobornables se produjo un golpe castrense respaldado por la aviación y desembarco de marines de Estados Unidos y Arbenz fue derrocado. Castillo Armas, se autoproclamó presidente y estableció una dictadura que revirtió todas las medidas de Arbenz.

                 Panamá y Omar Torrijos 
Omar Torrijos, el presidente de Panamá fue uno de los favoritos para ser eliminado por las grandes corporaciones. Cuando estas quisieron sobornarlo y corromperlo, se dieron cuenta que aquel hombre era incorruptible y tenía claro que Estados Unidos había explotado a Panamá y exigía el traspaso del canal a su país (hacer click aquí para ver El Canal de Panamá) https://elmordazblog.blogspot.com/search?q=torrijos.

                       Omar Torrijos (1929-1981)

Torrijos había renegociado el canal con el presidente Jimmy Carter para que fuera devuelto a Panamá. Murió en un dudoso accidente aéreo el 31 de julio de 1981 durante la primera presidencia de Ronald Reagan quien junto con su vicepresidente George Bush se habían opuesto enérgicamente a la entrega del canal. Hay fuertes sospechas de que no fue un accidente sino que explotó una bomba camuflada como grabador que había sido introducida por la CIA en el avión.

        Venezuela y Hugo Chávez 
En 1998 Hugo Chávez fue electo presidente de Venezuela y nuevamente el tema del petróleo volvió a surgir como causa de discordia y enfrentamiento con los Estados Unidos ya que Chávez sostenía que el petróleo debía ayudar a los venezolanos más que al país del norte. Hizo aprobar por el Congreso la Ley de Tierras, la de Hidrocarburos y la de Pesca que afectaba intereses de los Estados Unidos y de terratenientes.
                     Hugo Chávez (1954-2013)

En 2002 la CIA montó un golpe de Estado muy similar al que hizo Roosevelt en Irán. Pagó dinero para que grupos de personas hicieran levantamientos y piquetes callejeros que fueron agrandados hábilmente por los medios televisivos. Chávez fue derrocado durante un período de pocos días, durante los cuales algunos canales de televisión y varios medios informativos desarrollaron enormes esfuerzos para consolidar el golpe de Estado que finalmente fracasó. Desde entonces la CIA orquestó una campaña a nivel internacional para desacreditar a Hugo Chávez sin lograr sacarlo del poder. Fue el cáncer el que lo mató el 5 de marzo de 2013, dejando el gobierno a su sucesor Nicolás Maduro, que no parece estar a la altura de las circunstancias para enfrentar poderosos enemigo internos y externos.

                Iraq y Sadam Husein (1937-2006)
Iraq es el ejemplo perfecto de cómo funciona todo el sistema cuando los sobornos son inútiles. Sadam Husein era un dictador despiadado y psíquicamente inestable, pero eso no le importó a los Estados Unidos, cuando le dieron apoyo militar en forma de apoyo estratégico satelital, helicópteros y armamento durante su guerra contra Irán en el período 1980-88.

                 Sadam Hussein (1937-2006)

En 1990 Husein invadió Kuwait y esto ya afectaba intereses petroleros de las empresas norteamericanas y se desencadenó la Guerra del Golfo encabezada por los Estados Unidos y otras naciones duró un año, pero para acabar con la rabia era necesario matar al perro. La alternativa que se empleó para eliminar a Sadam Husein fue mediante la contratación de sicarios para asesinarlo. No fue fácil, el dictador tenía una guardia permanente que lo protegía y métodos de seguridad que otrora había aprendido de la CIA. Como seguía siendo un elemento conflictivo lo acusaron de poseer armas letales, cuya existencia nunca se comprobó.
Entonces se produjo una intromisión directa de fuerzas de los Estados Unidos en Irak con destrucción de ciudades y muerte de un número considerable de habitantes. Fue una operación costosa, pero muy redituable, especialmente para la empresa Halliburton, una corporación que posee más de 300 firmas subsidiarias y está distribuida en 70 países. Dick Chenney, consejero de Halliburton y el vicepresidente de mayor poder en la historia de los Estados Unidos, se las arregló para que la corporación consiguiera las licitaciones y reconstruir Irak. Terminada la gestión de Bush, Chenney se retiró de la empresa con una indemnización de 36 millones de dólares.
                    Dick Chenney (1941-)

Irak es una muestra de las 3 etapas del procedimiento: los gánsteres económicos que inicialmente fallaron en sobornar a Hussein, los sicarios que también fallaron en eliminarlo y finalmente los militares que invadieron Irak, capturaron a Hussein y lo ahorcaron.
Lo más trágico es que gracias a los medios, la mayoría de la población de los Estados Unidos y del mundo, ignora cómo se llevan a cabo estas operaciones. El país es un imperio, sin embargo el presidente no es el emperador, fue elegido democráticamente y gobierna durante un período limitado,  carece del poder de los emperadores romanos y debe justificarse ante el congreso. El verdadero emperador es la “corporatocracia”, un grupo de individuos que aplican a raja tabla las políticas neoliberales, manejan las grandes corporaciones del país, especialmente la industria de armamentos, controlan los medios y son los verdaderos emperadores. También presionan a los políticos porque financian sus campañas.
El objetivo principal de la corporatocracia es maximizar las ganancias, sin importar el costo social o ambiental que producen. Este proceso utiliza la deuda, el soborno y en última instancia el derrocamiento de un gobierno, pero para hacerlo necesitan siempre de una condición imprescindible: el apoyo de cipayos vernáculos tanto civiles como militares. Una vez con el país bajo control, las medidas que se adoptan son:
·         Devaluación de la moneda, permitiendo la compra de empresas locales por las corporaciones depredadoras a una fracción del valor original.
·         Recortes de fondos a los programas sociales, normalmente, educación, salud e investigación.
·         Privatización de empresas del estado.
·         Liberación del comercio anulando toda restricción a las importaciones.
Para implementar estas medidas, las corporaciones se valen del Banco Mundial y del FMI, ambas manejadas por los Estados Unidos.
El caso de Argentina fue el más fácil de todos y esto lo hace singularmente trágico y patético ya que el neoliberalismo logró instalarse en el gobierno por la vía democrática. Fueron CEOS de grandes empresas que actuaron de ambos lados del mostrador y desde el comienzo trabajaron para el único objetivo que los motivaba: enriquecerse a costa del Estado y de la población. Para ello contaron con dos elementos esenciales de los sistemas neoliberales: los medios y el poder judicial.
Fueron encabezados por Mauricio Macri, que mediante la mentira y la falta absoluta de escrúpulos, ambos componentes característicos del psicópata, transformaron a la Argentina en tierra arrasada. Para la corporatocracia imperial, este es el método ideal. No tuvo que hacer ningún esfuerzo, ya que el propio gobierno local, elegido democráticamente por los incautos que lo votaron, es quien entregó en bandeja la soberanía.
Ahora, derrotados en las urnas, Macri y su caterva se retiran para ser reemplazados por un gabinete de gente proba, honesta y capaz. En el ínterin el proyecto neoliberal permanece agazapado y listo para volver a la carga y recuperar el poder perdido, intentando entrar por cualquier resquicio que deje el gobierno del Frente para Todos.

John Perkins. Confessions of an economic hit man. Penguin USA.
Alberto Rozanski. Los sicarios del presidente. El País 29/06/2008.
M Martorell. Sadam, el hombre que se creyó Saladino. El Mundo.es
Juan Martínez Ahrens. El último secreto de la CIA en el golpe de estado en Irán. El País 23/06/2017.