Alberto Nisman (1963-2015)
No
es costumbre de este blog generar artículos de la política actual, pero
habiéndose cumplido 4 años de la muerte del fiscal Alberto Nisman, me parece
ineludible hacer una reflexión sobre el tema. La manipulación del periodismo
adicto al presente régimen, el engaño a un sector de la población, que
indudablemente estaba dispuesta a dejarse engatusar alegremente, los ríos de
tinta que se escribieron sobre la muerte del fiscal, incluyendo un libro, sobre
el cual haré referencia más adelante, hacen ineludible que dedique una nota
sobre el caso.
El fiscal Alberto Nisman tenía a su
cargo la causa del atentado contra la AMIA (asociación Mutual Israelita
Argentina). Fue designado para ese fin en 2004, pero durante los años que
siguieron el dinero que recibió para la investigación lo dilapidó en paseos y
viajes turísticos por las mejores y más caras playas del Caribe, siempre
acompañado de varios gatos (prostitutas de cierta jerarquía), con las cuales
gustaba exhibirse, como lo atestiguan las fotos del periodismo sensacionalista.
En vano los familiares de las
víctimas del atentado contra la AMIA, le solicitaron que agilizara la
investigación, Nisman los ignoró olímpicamente. Fue un asiduo concurrente de la
embajada de los Estados Unidos y probablemente allí le metieron la idea para que dejara
de lado la pista siria y se abocara a investigar un supuesto complot
constituido por iraníes, el Hezbolla, Venezuela, y por supuesto Cuba. La
investigación sobre el atentado quedó trunca porque Irán se negó a colaborar,
pese al pedido del gobierno argentino a cargo de la presidenta Cristina
Fernández de Kirchner (CFK) que emitió un Memorándum de Entendimiento con Irán,
aprobado por el Congreso.
En 2015, Nisman que venía acusando
al ex presidente Menem y al ex juez Galeano de presunto encubrimiento,
súbitamente desvió la causa hacia CFK, basándose en el memorándum. Era año
de elecciones y el candidato Macri respaldado por la derecha neoliberal y los
principales medios, inmediatamente aprovecharon la situación para desprestigiar
a la ex presidenta. Patricia Bullrich y Laura Alonso, dos deplorables engendros que más
tarde formarían parte del gabinete de Macri, agobiaron a Nisman con más de 40
llamadas telefónicas y lo convencieron para que elevara su denuncia ante el
Congreso el lunes 19 de enero.
El sábado 17 de enero, Nisman se
encontró tan flojo de papeles que se desesperó, su relación con su ex esposa
Arroyo Salgado era pésima y su principal argumento basado en que el gobierno de
CFK había hecho caer las alarmas rojas contra los funcionarios iraníes, resultó
falso porque el ex titular de Interpol Ronald Noble se apresuró a señalar que
las alarmas estaban vigentes. Pidió ayuda a los espías de la SIDE, pero estos
no respondieron sus llamadas y el juez Canicoba Corral y Julio Maier, ex profesor de Derecho
Procesal, acababan de señalar que la denuncia de Nisman era un mamarracho.
Agobiado por la angustia y la
depresión y con el terror de hacer un papelón ante el Congreso, en algún momento
de la tarde o principio de la noche, Nisman se encerró en el baño y se disparó
un tiro en la sien. Los medios hegemónicos La Nación y Clarín, que tienen el
triste antecedente de haberse apoderado de Papel Prensa torturando a sus dueños
y con la colaboración de la dictadura de Videla, inmediatamente pusieron sus
mejores plumas para que las sospechas sobre la muerte de Nisman se transformaran en un asesinato, inducido de alguna manera por CFK.
El Cuerpo Médico Forense de la Corte
Suprema constituido por 13 peritos, demostraron, en 200 carillas y con
argumentos lapidarios, que era imposible desde cualquier punto de vista que en
la muerte de Nisman hubieran participado terceras personas, o sea que el veredicto determinó que el fiscal
se había suicidado.
Este informe fue poco destacado por
Clarín y La Nación que siguieron insistiendo en la posible participación de la
ex presidenta en la muerte del fiscal. Esto hizo que un mes después, en la
Plaza de Mayo, se juntara una multitud en homenaje a Nisman. Fue una
manifestación que me hizo recordar a los incautos que fueron a vivar al etilista general Galtieri por la invasión a las Malvinas. En aquel caso se recurrió al
patriotismo que siempre prende fuerte en el pueblo. Un político inglés había
señalado muy acertadamente que el patriotismo es el último refugio de los
bribones. Fue el recurso final de una dictadura que hacía agua por
los cuatro costados.
La manifestación de Nisman fue
motivada por el odio hacia CFK y organizada por varios de los jueces más
venales y corruptos del Poder Judicial, entre los que se encontraban los que
poco tiempo después, presionados por el gobierno de Mauricio Macri, inventaron
causas contra la ex presidenta. Pasado un mes del suicidio, los periodistas
Nelson Castro y Santiago Kovadloff, volvieron a convocar a una nueva marcha. Se
encontraron en completa soledad, salvo las palomas, algunos turistas y gente
que con paso rápido, se desplazaba hacia el trabajo. O las convicciones de la sociedad son muy volátiles, o la gente ya no estaba
tan convencida del asesinato.
Mauricio Macri está obsesionado por ver a la ex
presidenta presa. El gobierno del ingeniero, o pseudo ingeniero, en tres años
logró destruir todos los resortes que hacen a la grandeza de un país: soberanía,
cultura, ciencia, educación, salud, arte, economía, y por supuesto justicia. Agreguemos a todo esto una inflación del 40% anual. Basado
en el robo y la mentira, la mafia de apátridas y ladrones que nos gobierna,
convocó a un nuevo peritaje sobre el caso Nisman.
Participaron peritos de la
Gendarmería de dudosa solvencia y de ecuanimidad aún más dudosa. Pasados dos
años y medio de la muerte del fiscal y sin disponer del cadáver se realizó el
nuevo peritaje. Es necesario señalar que, antes de que se estableciera el
informe, los diarios hegemónicos se apresuraron a escribir en grandes titulares que Nisman había sido asesinado. La Gendarmería emitió un comunicado
desmintiendo la información periodística, pero poco después, presionada por el
Gobierno (depende del Poder Ejecutivo), resolvió que se trató de un asesinato
ejecutado por al menos dos sicarios.
Pese a semejante orfandad de pruebas, este
peritaje y otros expedientes, son la base de la utilización política por parte
de las derechas de Estados Unidos e Israel y por parte del gobierno de Mauricio Macri
para meter presa, o al menos desacreditar a CFK, en estos momentos la principal
rival del gobierno para las elecciones de este año.
Se ha publicado el libro “Quien mató a Nisman”
de Pablo Duggan, un exhaustivo informe sobre la muerte por suicidio del fiscal
y que superada la cuarta edición, es la obra literaria de mayor éxito de venta en
Argentina. Recomiendo su lectura.
Excelente Ricardo
ResponderEliminarHola Adriana:
EliminarSé que te debo un ejemplar de mi nuevo libro, estoy esperando una partida de la editorial de España que me hace una rebaja respecto del precio en que se vende en Europa. Cuando lo tenga combinamos para entregártelo.
Cariños
Ricardo
Hola Ricardo, estuve leyendo tu comentario, muy sintético y preciso. Me gustó que mencionaras el libro de Duggan, quien ideológicamente estaba lejos de ser kirchnerista, pero el exhaustivo estudio que hizo sobre el caso Nisman, lo llevó a la conclusión de que se trató de un suicidio. Ahora los medios hegemónicos funcionales al gobierno vuelven a agitar el tema del asesinato.Si la justicia actúa en forma independiente y sin jueces venales deberán sentenciar que Nisman se suicidó.
ResponderEliminarAbrazo
Esperemos que así sea, pero las presiones de este gobierno de alimañas y corrupto, hará lo imposible para cambiar el giro de la causa.
EliminarAbrazo
Esther G
ResponderEliminarEl 18 se juntaron los gorilas que insisten con el asesinato. Según La Nación de strató d eun centenar de personas. Dividilo por 2 y quedan cincuenta.
Saludos
ESTUPENDO Y PRECISO ,COMO SIEMPRE ,RICARDO !AGUARDO CON IMPACIENCIA EL COMENTARIO SOBRE EL LIBRO DE DUGGAN !!CARIÑOS PARA ALICIA ,ABRAZO !!!MERCEDES
ResponderEliminarComo siempre todo muy bueno, con mucho rigor Ricardo
ResponderEliminarNo pude evitar el final
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