martes, 10 de septiembre de 2013

DOS MUJERES EN PUGNA




En la base de la Fuerza Aérea de Chile

Las dos niñas se ven diariamente, una se llama Evelyn y tiene 4 años, en cambio Michelle tiene 6 y obviamente por ser mayor es quién toma las decisiones. Comparten todos los juegos, Michelle lleva a su amiga en bicicleta a ver el mar, próximo a sus hogares, o contemplan los cazas que despegan de la pista con ruido ensordecedor. Porque ambas viven en la base de la Fuerza Aérea de Cerro Moreno a 26 kilómetros de Antofagasta. 

Como toda base militar del mundo, sus habitantes viven en un ghetto de espaldas y aislados del resto de la sociedad. La base los provee de todas las necesidades y también promueve el chismerío característico de estos barrios cerrados.

Michele y Evelyn son muy amigas y van a seguir siéndolo hasta más allá de la adolescencia. Después, cambios profundos en la política chilena separarán en forma amarga y penosa a las dos familias, hasta que ya adultas se vuelven a encontrar, pero políticamente enfrentadas. Una de ellas se postula para ser presidenta de Chile por segunda vez, la otra en reemplazo del candidato de derecha Pablo Longueira, quién retiró su candidatura víctima de un cuadro de depresión.



                                            Michele Bachelet y Evelyn Matthei

Dos familias muy amigas
En 1958 llega a la base el capitán Fernando Matthei, de 32 años, junto con su esposa, Elda Fornet, y tres hijos: Fernando (6), Evelyn (4) y Robert (1). Luego vendrían dos más. El mismo año, llega Alberto Bachelet Martínez, de 34 años, con su mujer, Ángela Jera, y sus dos hijos: Alberto (11) y Michelle (6) y entre ambas familias se establece una gran amistad. Alberto Bachelet y su esposa son de espíritu abierto y les sofoca el ambiente cerrado de la guarnición de sólo 60 familias. Considera que los militares deberían mezclarse con la población de Antofagasta y tiene conciencia de la enorme desigualdad que existe en la sociedad chilena. Pertenece a la masonería y secretamente admira a la revolución cubana. Indudablemente Bachelet es un militar muy atípico. Su esposa Ángela también intenta escapar del aislamiento de la base y trabaja en el Centro Universitario Zona Norte, de la Universidad de Chile.



                                        Alberto Bachelet y su esposa Ángel Jera

Por su parte, Matthei encuadra correctamente dentro de la casta militar, no le interesa el mundo fuera de los muros de la base, no se hace cuestionamientos filosóficos ni políticos e ideológicamente es de derecha sin caer en el nazismo. Tiene a su favor de que a diferencia de muchos de sus camaradas, es una persona ilustrada. Más allá de sus distintos matices, Alberto Bachelet y Fernando Matthei comparten intereses. Los dos son amantes del deporte, la literatura y la música clásica. No es raro que en Cerro Moreno crucen la calle que los separa para prestarse discos y conversar durante horas.

La amistad que nació en Cerro Moreno sigue en Santiago en los 60. Michelle Bachelet ya habla del "tío Fernando". Para Evelyn Matthei, Alberto Bachelet es "el tío Beto" y hasta hoy recuerda sus visitas a la casa familiar. Evelyn estudia becada en la Deutsche Schule. Michelle concurre a un establecimiento público: el Liceo 1. En 1969, el comandante Matthei se desempeña como profesor de la Academia de Guerra y el general Bachelet, como jefe de Finanzas de la Fuerza Aérea Chilena. En su oficina del Ministerio de Defensa, el general recibe a su amigo para charlar, como lo hacían en los años de Cerro Moreno.

Se separan los rumbos
Con la elección de septiembre de 1970 comienzan las primeras discrepancias. Matthei vota por Jorge Alessandri. Bachelet, por Salvador Allende. Pero esas diferencias no afectan la amistad: ninguno es dogmático y ambos se consideran constitucionalistas. En 1971, Matthei es destinado a Londres como agregado aeronáutico. Por su parte, Bachelet paralelamente a su jefatura en la Fuerza Aérea, lidera la Dirección Nacional de Abastecimiento y Comercialización (Dinac). Se trata de un cargo político en el gobierno socialista, con rango de ministerio, cuya función es luchar contra el mercado negro y el acaparamiento de productos. Matthei desde Londres, piensa que su amigo nunca debió aceptar ese puesto.



                           Comandante Fernando Matthei

El general Gustavo Leigh que había sido nombrado Comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile, le pide a Bachelet, que se limite a la dirección de Dinac. Es una jugada para marginarlo de las reuniones del alto mando. Bachelet ignora que Leigh es un traidor, que junto con Pinochet prepara el sangriento golpe que derrocará a Allende según los planes de la CIA ordenados por el presidente Nixon y su asesor Kissinger. Ver haciendo click aquí: La última hora deSalvador 

                        Richard Nixon y Henry Kissinger

El calvario del general Bachelet y el amigo que no se jugó
Al día siguiente del golpe, Bachelet es arrestado y torturado durante 30 horas en los subterráneos de la Academia de Guerra de la Aviación. Irónicamente, Matthei recién llegado de Londres está a cargo de esa institución, pero no hizo nada para rescatar a Bachelet. La cobardía y el miedo de perder su carrera se impusieron al honor y la solidaridad hacia su amigo. Criticar o pedir por Bachelet era renunciar a la institución, o a castigos peores. Matthei no dio ese paso y no le ha sido fácil vivir con ello: "Confieso que nunca lo fui a visitar ni al subterráneo de la academia ni a la cárcel, hecho del cual me avergüenzo”. Ese es el episodio más complejo en la relación entre ambos uniformados. Por este capítulo, las agrupaciones de DD.HH. han pedido su procesamiento.
Como consecuencia de las torturas, Bachelet muere de un ataque cardíaco el 12 de marzo de 1974. Matthei es nombrado comandante de las Fuerzas Armadas de Chile y aún bajo el régimen de Pinochet brega para que la viuda y su hija Michelle puedan regresar del exilio, un gesto tardío que su conciencia le exigía.

Angela Jeria ingresa a la Comisión Chilena de Derechos Humanos. Michelle, casada entonces con Jorge Dávalos, ya tiene a su primer hijo y retoma sus estudios de Medicina. En privado, a mediados de los 80, se sumerge en una fase clandestina para combatir al régimen. Por su parte, Evelyn Matthei, es una ingeniera comercial titulada en la Universidad Católica, que se desempeña como subgerente de Bancard, propiedad de Sebastián Piñera. Ambas ingresan a la arena política, pero en polos ideológicos opuestos. 

La carrera de Michelle es fulminante, asume en 2000 como ministra de Salud y Defensa y 6 años después termina instalada en La Moneda, siendo la primera mujer que accede a la presidencia en la historia de Chile. Evelyn fue senadora y se desempeña como ministra de Trabajo y Previsión Social.

Actualmente compiten para suceder al presidente Piñera, Michelle por el Partido Nueva Mayoría y Evelyn por el partido Unión Demócrata Independiente. La historia las vuelve a encontrar en veredas separadas.

Epílogo

                         General Gustavo Leigh

Transcurre el año 1990 y el general Leigh se ha retirado del ejército, o mejor dicho fue retirado por desavenencias con Pinochet en 1978 y reemplazado en el cargo, nada menos que por Fernando Matthei. Leigh considerado el más duro de la junta de revolucionarios, el que ordenó el bombardeo con aviones Hawker Hunter al palacio de La Moneda, el que supervisó torturas y colaboró con la férrea dictadura de Pinochet, tiene ahora 70 años. 

Se encuentra trabajando en el despacho de su empresa inmobiliaria cuando escucha gritos, ruidos de objetos que se desploman y cristales que se rompen en mil pedazos. Apenas tiene tiempo de levantarse de su sillón cuando ingresan varios miembros del Frente patriótico Manuel Rodríguez. Recibe cinco disparos, uno en el ojo que lo deja tuerto, pero a pesar de las heridas sobrevive al ataque. El 29 de septiembre fallece de un paro cardíaco.

Fuentes
Nancy Castillo y Rocío Montes.  La historia que une a Bachelet y Matthei: la Tercera de Chile 27/7/2013. http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2013/08/130730_la_historia_que_une_a_bachelet_y_matthei_mxaurista.shtml

3 comentarios:

  1. Excelente Ricardo. Que viva el pueblo latinoamericano!!!!

    Jorge

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  2. Interesante artículo sobre estas dos distinguidas señoras trasandinas. Una de ellas ya demostró sus enormes capacidades de estadista, cuenta con una excelente imagen y seguramente volverá a ser elegida presidente.
    De la otra poco se conoce de su desempeño como funcionaria, por estos lados, aunque no hay nada que opaque su labor. En el artículo pareciera que se la acusa de portación de apellido, algo muy común en nuestra tierra.
    Como dije, dos distinguidísimas señoras que se contraponen a la ordinaria de Tolosa.

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  3. Muy bueno, lo compartí en mi facebook

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