martes, 26 de mayo de 2015

DROGAS Y CREATIVIDAD


Las dos Lucy
Se especula que el consumo de drogas aumenta la creatividad y la mayoría de las bandas de rock consumen sustancias adictivas para aumentar el rendimiento en escena y como fuente de inspiración de nuevas partituras. ¿Hubieran escrito los Beatles Lucy in the Sky with Diamonds (Lucy en el cielo con diamantes), si no hubieran tomado LSD? La letra de la canción contiene versos en los que abundan imágenes que reflejan una travesía psicodélica. Se trata de un viaje en un barco a través de un fantástico país de flores de celofán, taxis de papel de periódico y un paisaje con árboles de mandarina y cielo de mermelada. El estribillo repite sin cesar: Lucy in the Sky with Diamonds.

                         Christa Sydney. Lucy in the Sky with diamonds.

El mismo Paul McCartney dijo: “como podrán imaginar, la canción es sobre una alucinación” y es muy sugestivo que las iniciales del título formen el acrónimo LSD, que no es otra cosa que el ácido lisérgico. 

La pieza es una de las más populares de los Beatles y a ella se debe, que el esqueleto del homínido más antiguo perteneciente a la especie Astralopithecus afarensis, de 3,2 millones de años de antigüedad, fuera denominado Lucy. Porque en el momento de ser encontrado el fósil de este antepasado nuestro, los antropólogos estaban escuchando Lucy in the Sky with Diamonds bajo el tórrido sol de Etiopía.

Una peligrosa elección
Un gran número de artistas y compositores de bandas de rock, recurren a las drogas para inspirarse, en un contrato riesgoso al estilo de Fausto, donde el diablo es reemplazado por un agente psicodélico. “El ácido me abrió la mente”, sentenció en una oportunidad Graham Nash del grupo Crosby Stills & Nash, admitiendo que varias de sus canciones fueron inspiradas bajo el influjo de drogas.

Para esta y otras bandas, consumir cocaína o LSD antes de cada función se ha vuelto prácticamente un ritual. En muchas ocasiones tienen que regrabar una pieza porque, a consecuencia de la droga, el tempo musical se volvió ridículamente acelerado.

En general quienes consumen sustancias adictivas están convencidos que aumentan su creatividad, aspecto que es de difícil comprobación, porque los estudios realizados son escasos y las conclusiones están limitadas por razones metodológicas.

                           Jim Morrison (1943-1971)

Jim Morrison, el ícono del pop, sirve como ejemplo para investigar la interrelación entre la creatividad y el abuso de alcohol y drogas. Morrison fue un poeta, compositor y cantante estadounidense, célebre por ser el vocalista del influyente grupo de rock psicodélico The Doors. En la letra de Morrison y en sus descripciones biográficas se aprecia cómo trató de superar los episodios traumáticos, los estados depresivos y los impulsos descontrolados mediante actividades creativas con el auxilio de drogas. Es probable que su talento, que sin duda era grande, así como su habilidad y motivación para escribir letras de rock, fueran independientes del consumo de sustancias, pero recurría a ellas para transgredir normas sociales, ampliar sus percepciones y reforzar sus esfuerzos para mantenerse en la cima de la fama y la creatividad.

Con el tiempo, el consumo de alcohol y drogas debilitaron su capacidad creativa y fueron la causa de su muerte precoz cuando sólo tenía 27 años, la misma edad en que por las mismas razones murió Kurt Cobain y otros músicos de rock (Brian Jones, Jimi Hendrix, Janis Hoplin), que dieron origen al llamado club de los 27, porque todos fallecieron a esa edad. Jim Morrison fue un típico ejemplo de como las sustancias adictivas en un principio estimulan la creatividad y luego destruyen el organismo de quién las consume.

                                               Kurt Cobain (1967-1994).

Llega un momento en que la persona adicta ya no consume la sustancia para obtener placer sino para evitar los circuitos desagradables y dolorosos que se activan cuando se interrumpe la droga, el conocido fenómeno del síndrome de abstinencia. El vocalista británico Graham Nash, al referirse a David Crosby, manifestó que padecía de “psicosis de la cocaína”, la paranoia que sobreviene cuando el individuo está descontrolado con la droga.

                                      David Crosby, Stephen Stills Graham Nash.

Quien quiera adentrarse en las profundidades de la música rock y sus artistas, pero más que nada en la vida de Nash y la historia de su banda, está invitado a leer Wild tales, algo así como “cuentos salvajes”, que en su mayor parte es la autobiografía del propio Nash. En ella su autor describe cómo la droga impactó con altibajos sus vida y la actividad artística del grupo. También detalla con honestidad y valentía los episodios desgarradores ocasionados por la adicción, tanto en él como en los demás miembros de la banda.

El libro de Nash, además de su informe sobre las bandas de rock y su intrigante autobiografía, aporta interesantes enfoques sobre cómo se desarrolla la creatividad, como se puede incentivar mediante el consumo de drogas ilícitas y como la adicción termina destruyendo el organismo y la propia creatividad del individuo. Es una obra consultada por los especialistas en neurociencias relacionadas con el consumo de drogas.

¿Habrían los talentos de las bandas de rock mantenido la capacidad creativa sin necesidad de alucinógenos, o quedarían relegados al anonimato como la gran mayoría de los mortales? Es probable que este enigma quede sin respuesta.

Fuentes
Fields RD. Creativity, Madness and Drugs. Scientific American 2013, November 22.

Marano HE. Genius and madness. Psychology Today 2008. http://www.psychologytoday.com/articles/200705/genius-and-madness

Holm-Hadulla RM, Bertolino A. Creativity, Alcohol and Drug Abuse: The Pop Icon Jim Morrison. Psychopathology. 2013 Sep 18.

King Humphrey E. The Mad Artist's Brain: The Connection between Creativity and Mental Illness. Scientific American October 28, 2010.



miércoles, 20 de mayo de 2015

EL MUNDO ES REDONDO

Que la Tierra es redonda, no es novedad alguna y hasta la civilización más primitiva del planeta lo sabe. Sin embargo, durante gran parte de la Edad Media, la esfericidad del mundo en que vivimos era cuestionada en no pocos ámbitos científicos.

En los albores del Renacimiento, era un hecho aceptado que la Tierra es redonda, pero se ignoraba su tamaño, o mejor dicho su circunferencia que es lo que más interesaba para la navegación, especialmente después que ejércitos del Imperio Otomano conducidos por Suleiman el Magnífico, pusieron grandes dificultades para que los europeos, dirigiéndose por tierra hacia el este, llegaran a la India y pudieran adquirir las preciadas especias.

La solución era dirigirse hacia el oeste, atravesando un mar cuyo tamaño era desconocido. Los atlas de la época de Colón consideraban que la circunferencia terrestre era de aproximadamente 30.000 kilómetros. Por su parte, el navegante genovés, quizás en su entusiasmo de convencer a los reyes católicos, cometió gruesos errores de cálculo ya que consideró que Japón estaba a poco más de 4000 kilómetros de Europa, o sea en donde México se encuentra actualmente.


Cristóbal Colón (143 o 56- 1506). Probablemente ningún personaje de la historia tuvo tantos retratos  y ninguno parecido al otro. 

Conocimientos mucho más precisos que los europeos sobre geografía, astronomía y cualquier otra disciplina, ya la tenían los griegos dos mil años antes que la Europa sumida en el oscurantismo de la Edad Media. Y si los reyes católicos en su fanatismo religioso no hubieran tomado la trágica decisión de expulsar a los judíos y a los árabes, las dos civilizaciones más desarrolladas de entonces, muchos aspectos de la historia habrían sido distintos. Los árabes, en su proximidad con Alejandría se nutrieron de la cultura grecorromana y por ello sus conocimientos fueron mucho más avanzados que en el resto de Europa.

Eratóstenes y la circunferencia terrestre


                                                   Eratóstenes 

Eratóstenes nació en Cirene, Libia en el año 284 antes de JC y se podría decir que era el Leonardo Da Vinci del mundo griego de entonces. Sus conocimientos abarcaban la geografía, la astronomía, la historia, las matemáticas y la filosofía y en sus horas libres, entre otras actividades escribía poemas. Su fama llegó a los oídos de Ptolomeo III, rey de Alejandría, el enclave griego en Egipto, que junto con Atenas constituían los dos focos de ciencia del mundo antiguo. Ptolomeo quería que Eratóstenes educara a sus hijos y en recompensa lo nombró director de la famosa Biblioteca.

Fue allí que un día leyó en un papiro que en el puesto militar de Siena, cerca de las cataratas del Nilo, en el mediodía del 21 de junio del solsticio de verano, una vara vertical no proyectaba sombra. Para cualquier lector este dato era intrascendente, prácticamente insignificante, pero no para un observador como Eratóstenes. Comprobó que en la misma fecha y a la misma hora en Alejandría el sol producía una sombra en una vara semejante. La primera deducción que hizo fue que el mundo no era plano, porque de ser así debido a la enorme distancia entre el Sol y nuestro planeta, los rayos deberían caer verticalmente tanto en Siena como en Alejandría. 

Dedujo que la Tierra tenía una curvatura o sea que era redonda y cuanto mayor fuera la curvatura, mayor será la diferencia entre las longitudes de la sombras. Si se prolongan los palos hasta llegar al centro de la tierra formarán un ángulo de 7 grados. Para eso, necesitaba un dato más: la distancia entre Siena y Alejandría, entonces contrató gente que caminando, midiera la distancia que fue calculada en 800 kilómetros (5040 estadios, que eran la unidad de longitud griega). Siete grados es la cincuentava parte de los trescientos sesenta grados de la circunferencia terrestre. Multiplicó 800 kilómetros por 50 y el resultado fueron 40.000 kilómetros, 76 kilómetros menos que la circunferencia real calculada por medio de satélites artificiales.

Phileas Fogg y Nelly Bly: la ficción y la realidad

Julio Verne (1828-1905) y una de las primeras portadas de su novela La vuelta al mundo en 80 días.

En 1872, ya se conocía con bastante exactitud la circunferencia terrestre, por lo tanto, el flemático caballero británico Phileas Fogg de la obra de Julio Verne, apostó a los demás socios del aristocrático club que frecuentaba, que podía dar la vuelta al mundo en 80 días. Fogg regresó a su casa un viernes 20 creyendo que era sábado 21, porque había tardado 81 días según el registro meticuloso que llevaba en su diario, pero como se había dirigido hacia el este había ganado 24 horas y también la apuesta que hizo a sus amigos.

Diez y siete años después que Julio Verne escribiera su famosa novela; Nellie Bly una periodista audaz del New York World de Nueva York, repitió la hazaña de Fogg, pero tardó 8 días menos y a su regreso en Jersey City una muchedumbre de gente, fotógrafos y periodistas la aguardaba en la estación.

                        Nelly Bly (1864-1922)

Menos afortunado que Fogg fue Magallanes, quién partió de San Lucar de Barrameda el 10 de agosto de 1519 con 5 naves y una tripulación de 265 hombres y se encontró con que recién muy al sur se lograba acceso al océano Pacífico de una inmensidad inimaginable. Casi tres años después sólo una nave con 18 hombres arribó al mismo puerto. Desdentados por el escorbuto, flacos y envejecidos, resultaban irreconocibles para quienes los vieron zarpar jóvenes y robustos. Los detalles de la expedición figuran en el diario de uno de los tripulantes: Antonio Pigafetta, quién fue tan minucioso en su registro, que al llegar a España notó que a su diario le faltaba un día. A diferencia de Fogg, la expedición zarpó hacia el oeste y por lo tanto perdió 24 horas.
Magallanes murió en las Filipinas y no alcanzó a ver que su viaje fue la aventura más extraordinaria en la historia de la humanidad.


Leonardo Moledo. Cristóbal Colón y la redondez de la Tierra. Historia de la ciencia. http://leonardomoledohistoriadelaciencia.blogspot.com.ar/2009/09/cristobal-colon-y-la-redondez-de-la.html

Carl Sagan. Cosmos. Editorial Planeta, Barcerlona 1980.
Stefan Sweig Magallanes.

Julio Verne. La vuelta al mundo en ochenta días.

Eratóstenes y la medición de la esfera terrestre. AstroMía. http://www.astromia.com/biografias/eratostenes.htm





miércoles, 13 de mayo de 2015

DE TRAIDORES Y OPORTUNISTAS

La araña que salvaste te picó,
que vas a hacer,
y el hombre que ayudaste te hizo mal
dale nomás, y todo el carnaval, gritando pisoteó
la mano fraternal, que Dios te dio”.
Desencuentro, de Cátulo Castillo con música de Aníbal Troilo.

La historia argentina es fructífera en traidores y oportunistas y para hacer el relato corto y no fatigar al lector, me limitaré a los personajes más emblemáticos de los últimos años que incurrieron en el sucio arte de la puñalada por la espalda. Tres de ellos adquirieron notoriedad gracias a la mano que les tendió el ex presidente Néstor Kirchner y debo admitir que dentro de las muchas virtudes del bizco, el olfato para saber elegir candidatos, no era su fuerte.


                     Julio Cleto Cobos
Que la historia me juzgue, pido perdón si me equivoco. Mi voto... Mi voto no es positivo... mi voto es en contra”. En el Senado de la Nación el 17/07/2008.

Cobos nació en la ciudad de Godoy Cruz en Mendoza y en esa provincia hizo toda su carrera profesional, destacándose como ingeniero civil, asesorando diversas obras, especialmente en el terreno de la hidráulica. En 1991 cuando tenía 36 años, se afilió a la UCR y fue desempeñando varios cargos en la provincia de Mendoza. 

Lenta y pacientemente fue ascendiendo en la categoría de las funciones que le tocó ejercer y en el año 2000, gracias a sus antecedentes profesionales, se convirtió en el Ministro de Ambiente y de Obras Públicas.

Finalmente en 2003 llegó al cargo máximo que puede aspirar un político dentro de su provincia: el ser elegido gobernador, liderando una coalición entre la UCR mendocina, Recrear y Federal. Durante su gestión adoptó una política de diálogo con el presiente Néstor Kirchner, actitud que fue mirada con recelo y profunda censura por muchos de sus correligionarios.

Néstor Kirchner tenía la idea de la transversalidad y dada las buenas relaciones y el diálogo fluido que había tenido con Cobos, consideró que la vicepresidencia podía caer en manos de un radical. No imaginó que había metido al zorro en el gallinero. El 28 de julio de 2007, en el Club Asturiano de Vicente López, Cobos fue proclamado compañero de fórmula de Cristina Fernández que en octubre ganó en primera vuelta con el 45,2% del total del electorado. La dirigencia radical que siempre se caracterizó por un rechazo visceral hacia el peronismo o lo que se le pareciera, expulsó a Cobos del partido. Fue la primera vez que le endilgaron el mote de “traidor”.

La relación entre la presidenta y su vice se mantuvo relativamente armónica hasta que el Ministro de Economía Martín Lousteau sacó la resolución 125 que establecía la movilidad de las retenciones a las exportaciones del sector agropecuario, de modo que las mismas aumentaran cuando el precio internacional subiera y disminuyeran, cuando el precio bajara. Era una fórmula razonable y que incluso con los años, hubiera podido beneficiar a los agricultores durante las caídas del precio de los granos en la bolsa de Chicago.

Pero los grandes terratenientes acostumbrados desde tiempos pretéritos a ser intocables, establecieron el lock out patronal más feroz que recuerda la historia del país. Los casi 500 estancieros dueños de más de 9 millones de hectáreas, se adueñaron de las principales rutas y las bloquearon durante más de 4 meses. El gobierno nunca los reprimió.

A esta altura de los acontecimientos surgió un segundo traidor: Eduardo Buzzi, el dirigente de la Federación Agraria Argentina, quien se puso del lado de los grandes ruralistas, los principales enemigos del pequeño y mediano agricultor a quienes él representaba. Este renegado pagaría años más tarde su canallada, ya que en 2015 fue destituido de su cargo en la FAA y en las PASO de Santa Fe con un insignificante 3%, se evaporaron sus veleidades de político.

En el ambiente turbulento que se vivía, el Senado tenía que aprobar la ley y ante el empate técnico le tocó al Presidente de esa Cámara, es decir a Cobos, la decisión final. Fue el 17 de julio de 2008 en que después de una extensa explicación, tratando de justificar su actitud pasó a la historia con su famosa frase: ”mi voto no es positivo”. Júbilo de los terratenientes, la oposición, la Sociedad Rural Argentina y la prensa hegemónica, que ascendieron a Cobos al pedestal de los héroes. La UCR acogió en sus brazos al hijo pródigo, paradójicamente purificado por una nueva traición.


                             Alberto Fernández
“Es una gran pérdida porque Nisman había avanzado mucho en la causa AMIA y me parece que hemos perdido a la memoria de esa causa ya que era un obsesivo de ella"  El 12/02/2015 en un canal de TV.

Se ignora que motivó a Néstor Kirchner llamar a Alberto Fernández para que ocupara la Jefatura de Gabinete de Ministros. Además de la cara, que lo vendía de entrada, portaba una mochila de antecedentes totalmente opuesta a los principios sociales y económicos del kirchnerismo. Se había desempeñado en el gobierno del turco y en el año 2000 integró la lista de candidatos a Legislador de la Ciudad de Buenos Aires en la coalición “Encuentro por la Ciudad”, liderada por el “Mingo” Cavallo.

Cuando finalizó el lock out patronal también terminó la participación de Fernández en la Jefatura de Gabinete. No había manejado bien el conflicto con el campo y tenía enfrentamientos con algunos ministros. Es así, que de defensor a ultranza del gobierno de Cristina pasó en cuestión de horas a convertirse en acérrimo crítico de su gestión, lo que permitió que Magnetto, el CEO de Clarín lo convocara para desfilar en los medios del monopolio haciendo comentarios descalificantes sobre la Presidenta. 

El diario La Nación lo arropó entre sus columnistas en varias oportunidades. En septiembre del año pasado criticó el discurso de Máximo Kirchner en un acto de la Cámpora tergiversando sus expresiones sobre una posible re-reelección de Cristina. También a través de los mismos medios atacó en varias ocasiones al vicepresidente Boudou, a la gestión económica del gobierno y ni el ministro de Economía Axel Kicillof, ni el Jefe del Gabinete Jorge Capitanich o el Director de la AFIP, se salvaron de su coprodispersor.

A la deriva y sin brújula amenazó con su candidatura a senador por la Capital y las encuestas lo devolvieron a la realidad: no medía nada, por lo que tuvo que archivar esa aventura. Más tarde intentó reflotar su aparición, esta vez colgado de Massa, pero el “lanzamiento” murió en la más desoladora intrascendencia. Si me preguntan en donde está ubicado en este momento Alberto, creo que ni el mismo podría dar una respuesta.


                         Sergio Massa
Hola soy Sergio Massa y te hablo a vo que tajai”.
Discurso dirigido a los votantes de Córdoba remedando el estilo cordobés.

Si los antecedentes políticos de Aníbal Fernández son lamentables, los de Sergio Massa los sobrepasa con creces y tampoco se entiende porqué Néstor Kirchner le tendió la mano que después Massa le picó, como la araña del tango de Cátulo Castillo.

Massa formó parte del ala derecha de la UCeDé, liderada por el propio Alsogaray o sea que se ubicó en la ultraderecha de la derecha. Siendo un entusiasta del gobierno del turco formó parte del grupo de la UCeDé que migró masivamente al Partido Justicialista, no por principios sino por oportunismo, que es el atributo más destacado de este advenedizo. Como fruta del postre, pasó a militar en el Partido de San Martín con el dirigente sindical Luis Barrionuevo. Durante el gobierno de Eduardo Duhalde se desempeñó como titular del ANSES.

Con este deplorable bagaje fue llamado por Néstor Kirchner para reemplazar a Alberto Fernández como Jefe de Gabinete. Fue durante el ejercicio de este cargo que Massa mostró de cuerpo entero su relativismo moral. Se presentó ante la embajadora de Estados Unidos para desacreditar al gobierno del cual él formaba parte. En uno de esos diálogos, habría calificado al expresidente Néstor Kirchner despectivamente de «perverso» y de «cobarde».

El renegado no contó con la aparición de Julián Assange y sus WikiLeaks que lo desenmascaró definitivamente. Massa negó luego haber tenido esas charlas, desmintiendo a las autoridades diplomáticas estadounidenses. Ese comportamiento, aquí y en cualquier lugar del mundo, se llama traición y carece de antecedentes en la historia política de la Argentina.
Actualmente se encuentra en plena declinación, ya no es convocado por los medios dominantes y ha perdido laderos, tan oportunistas como él. La razón es que Massa es de ultraderecha, tanto o más que Macri, pero a diferencia del procesado Jefe de la Ciudad, que está posicionado claramente en ese espectro, Massa se presenta turbio, ambiguo, un verdadero hermafrodita de la política, que pretendiendo quedar bien con todos, ofrece una imagen confusa y una oratoria impostada, rica en slogans y pobre en contenido. Con nuestros impuestos cobra el sueldo de diputado, pero son contadas las veces en que asistió a las sesiones de la Cámara Baja.


Alberto Fernández. El Gobierno no tiene rumbo, en parte por la necedad de Cristina Kirchner. La Nación 09/01/2014.
Alberto Fernández. Si Boudou se hubera dedicado todo el tiempo a jugar sudoku hubiera hecho menos daño. La Nación 13/03/2014.

En el massismo hablan de expulsar a Alberto Fernandez por “doble agente”. La Política “on line”. 09/03/2014.

Santiago O’Donell. Argenleaks. Editorial Sudamericana, Buenos Aires 2011.

Martín Granovsky. Por obtener votos a cualquier precio tratan de arriar a la gente como ganado. Página 12, 09/03/2014.


miércoles, 6 de mayo de 2015

FINAL DE UNA GUERRA INFAME


Hace 40 años, el 30 de abril de 1975, finalizó la guerra de Viet Nam, con la derrota más humillante en la historia de los conflictos bélicos, donde el ejército más poderoso del mundo cayó derrotado por una pequeña nación agricultora y sin tecnología industrial alguna. Es bueno recordar el episodio.

Antecedentes
Terminada la Segunda Guerra Mundial, Ho Chi Minh inició negociaciones con el gobierno francés para lograr la independencia de Vietnam, pero las conversaciones llegaron a un callejón sin salida. El ejército francés parcialmente restablecido de su desastrosa experiencia contra Alemania, quería recuperar prestigio y no estaba dispuesto a ceder su colonia tan fácilmente.

Después de 8 años de conflicto en que Francia quedó económicamente exhausta y perdió decenas de miles de hombres, la última batalla en la planicie de Dien Bien Puh, puso fin al oprobioso colonialismo galo en esa zona de Asia.



Prisioneros franceses después de la caída de Dien Bien Puh

Finalmente se firmó el acuerdo de Ginebra donde Vietnam quedó dividido en un territorio norte comunista y otro sur gobernado por Ngo Dinh Diem, un títere de Estados Unidos. El arreglo era que se harían elecciones para definir si se unificaba o no Vietnam. Ngo Dinh Diem era un inepto y un desequilibrado mental que se transformó en feroz dictador. Miles de campesinos huyeron hacia Vietnam del norte y engrosaron las fuerzas del general Giap.
Diem fue asesinado por sus propios oficiales y como el compromiso de llamar a elecciones no se cumplió, el Vietminh, ahora denominado Vietcong, inició nuevamente las hostilidades.

Intromisión de Estados Unidos
Estados Unidos temeroso de un efecto dominó se involucró en esta nueva guerra, primero durante el gobierno de Kennedy enviando a miles de asesores. Su sucesor Johnson y el secretario de Estado McNamara, viendo la impotencia de las fuerzas de Vietnam del Sur ante el avance del Vietcong, se introdujeron de lleno en el conflicto utilizando como excusa el ataque a una nave americana en el Golfo de Tonkin.

En esta guerra, el país del norte utilizó toda la parafernalia bélica contra las fuerzas de Giap: bombardeos masivos y constantes, bombas de fragmentación, el uso del napalm a escala monstruosa y defoliantes que destruyeron las selvas de Vietnam y todavía hoy, producen secuelas y malformaciones entre los aldeanos.

Dicen que es bueno aprender del error del enemigo para evitar desastres propios, pero Washington y el Pentágono, cometieron las mismas fallas que los franceses. Para mayor desgracia, los enfrentaba el general Vo Nguyen Giap, el más grande estratega del mundo moderno.



          El genio político Ho Chi Minh y el genio militar Vo Nguyen Giap

El soldado norteamericano fue a esa guerra sin convicción alguna y sin saber para qué luchaba. En el otro extremo del planeta había quedado su familia a la cual regresaría con secuelas de los combates en el mejor de los casos o en una bolsa plástica si lo alcanzaba una bala del Vietcong. En contraposición absoluta, los vietnamitas luchaban por su propio territorio, para ellos se trataba de una guerra de supervivencia con una estrategia sin tiempo. Cada labrador, cada mujer de  aldea era un espía que informaba al general Giap dónde estaba la patrulla yanki, cuántos hombres la componían y que armas llevaban. Para las fuerzas norteamericanas, la selva y la noche eran sus peores enemigos, para los vietnamitas ambos factores les facilitaban las emboscadas y los protegían de aviones y tanques.


                     Rotundo rechazo a la guerra dentro de Estados Unidos

Final de una derrota anunciada
La guerra duró 16 años, hasta que el 30 de abril de 1975, levantó vuelo el último helicóptero Chinook desde la terraza de la Embajada de Estados Unidos, con soldados y diplomáticos colgados como racimos. Muchas manos y brazos fueron quebrados por los culatazos de los marines para desprenderlos. No pocos murieron en el intento.

Personal norteamericano de la CIA huye desesperado ante el avance del Vietcong

Como un trágico dominó se desplomaron una tras otra, las ciudades que fueron cayendo en poder de los guerrilleros. Los soldados survietnamitas arrojaban sus armas y emprendían la huida. Finalmente cayó Da Nang, otrora la base orgullo del ejército estadounidense.

Los cohetes disparados por el Vietcong sobre la ciudad, el cierre de establecimientos (incluso varios de los tugurios donde reinaban el juego, la prostitución y el tráfico de drogas), los cortes de luz y la escasez de alimentos deterioraban la situación hora a hora. A los millones de desplazados del interior, que taponaban las rutas aún abiertas pero con una barrera de alambre de púas a los costados, sin agua, sin comida, muchos de ellos heridos o enfermos, se sumaron los soldados en retirada a bordo de todo tipo de vehículos, lo que transformó la situación en caótica, ya que prácticamente nadie podía moverse del lugar.

Thieu y otros muchos funcionarios ya habían huido, no había gobierno. Al mediodía apareció un jeep por la calle principal enarbolando una gran bandera del Vietcong, con sus colores rojo y azul y una estrella amarilla en el centro. Entonces aparecieron los combatientes de Giap, la mayoría de los soldados norteamericanos nunca vieron a ninguno. Eran casi adolescentes, con cascos hechos con fibras vegetales, camisolas de color verde, sandalias fabricadas con caucho de neumáticos, y armados con fusiles chinos de asalto. Ingresaron al Palacio Presidencial, e izaron la bandera del Vietcong. Eran las 12.15 del sábado 30 de abril en que finalizó aquella guerra infame iniciada por el neocolonialismo yanki.

Secuelas de la guerra
Alrededor de medio millón de soldados estadounidenses fueron a Vietnam, de los cuales más de 58 mil nunca regresaron vivos. Se estima que los heridos, mutilados y afectados psicológicamente superaron los 300 mil.
Dos millones de vietnamitas murieron en la guerra, muchos alcanzados por toneladas de explosivos, el napalm o víctimas del “agente naranja”, letal sustancia tóxica, arrojada por los temibles superbombarderos B-52 a lo largo de un decenio.

En 1978 estando yo de visita en la Universidad de Stanford en California, tuve oportunidad de asistir a una conferencia de un médico vietnamita. Hablaba en francés y a su lado un estudiante traducía su disertación al inglés. Con voz suave y calma, aquel médico fue relatando como las fuerzas armadas norteamericanas destruyeron su país, devastaron su agricultura, arruinaron por siglos selvas enteras y bombardearon las ciudades matando mujeres y niños. Atónita y conmovida, la concurrencia tuvo oportunidad de enterarse lo que los medios de información de Estados Unidos jamás le contaron.



En su viaje a Vietnam, la presidenta Cristina visitó los túneles hechos por las fuerzas de Giap

A 40 años de la caída de Saigón. Página 12, 30/04/2015
Halbestam D. Ho. Editorial Bruguera, Barcelona 1975.

Brigha RK. Battlefield Vietnam: a brief history. http://www.pbs.org/battlefieldvietnam/history/index.html

Spartacus Educational. Vo Nguyen Giap. http://www.spartacus.schoolnet.co.uk/VNgiap.htm

Vietnam war. Encyclopaedia Britannica, tomo 12, pag 361. Chicago 1995.